Imbabura: Los yachak preservan los rituales antiguos en Angochagua

CEREMONIA. Fernando Colimba y Rosa Sandoval, con sus trajes típicos, son los encargados de los rituales para la limpieza de malas energías.
CEREMONIA. Fernando Colimba y Rosa Sandoval, con sus trajes típicos, son los encargados de los rituales para la limpieza de malas energías.

En esta parroquia de Ibarra mantienen el ritual de los sabios karankis para devolver las buenas energías.

Redacciòn IMBABURA
En comunidades de Ecuador que aún mantienen ciertos rasgos ancestrales, el yachak es considerado el hombre del conocimiento.

Es además el sabio, el médico tradicional y también el consejero y mediador de conflictos.

Fernando Colimba, conocido en Angochagua como yachak, quien se ha preparado junto con sus mayores en Perú, Colombia y Bolivia, relata que es un personaje de respeto para los pueblos indígenas y para quienes creen en su poder de conectarse con espíritus benignos y sanar algunas enfermedades.

“Yo me responsabilizo de todos mis actos. Somos descendientes de nuestros taitas y mamas que eran yachaks y que significa un hombre sabio que sabe el qué y para qué”, agrega.

Vigila el bienestar de las personas
En algunas comunidades de Imbabura, el yachak además es conocido por asegurarse del bie-nestar de las personas. Realiza constantemente gestiones o convoca a mingas para la apertura y limpieza de caminos.

SABIO. Fernando Colimba es un yachak de respeto para los pueblos indígenas.
SABIO. Fernando Colimba es un yachak de respeto para los pueblos indígenas.

Ceremonia de purificación
Una de las ceremonias que todavía se conservan en Angochagua, parroquia rural localizada a unos 15 minutos de Ibarra, es la de recibimiento, que se hace cuando llegan a las comunidades personas importantes.

Colimba manifiesta que la purificación de los pies antes de entrar a un territorio es un acto ancestral que lo practica desde inicios de la civilización.

El lugar donde se lleva a cabo este rito de saberes es seleccionado por la comunidad luego de analizar la historia de tradiciones de sus antepasados.

En Angochagua, según Colimba, los rituales de limpieza se remontan a antes de la Conquista del pueblo kichwa karankis.

En los últimos años las juntas parroquiales de Angochagua construyeron un escenario apropiado para este tipo de ceremonias. Una pequeña plaza con varios círculos, a pocos metros del río Tahuando, es el sitio en el cual se acoge a los visitantes. “Nuestros abuelos acudían a esta plaza, llena de energías y sabiduría, para realizar la purificación de un nuevo hogar y un nuevo matrimonio”, menciona Fernando.

Los yachaks piden ayuda a elementos de la naturaleza como el Sol, el agua, la tierra y el fuego, lo cuales permiten curar diversas dolencias, incluso aquellas a las que los médicos catalogan como incurables. (CHRW – VMWF)

Con tradición
° La parroquia Angochangua, creada en 1861, está ubicada en el suroriente de Imbabura y al sur del cantón Ibarra. Es uno de los sitios que se ha preocupado por mantener vivas sus costumbres ancestrales en las comunidades que la conforman: Magdalena, Rinconada, Angochagua, Chilco, Zuleta, Cochas, entre las más grandes.

En este lugar se pueden encontrar los bordados a mano, tradición también ancestral de los pueblos indígenas de este sector, o disfrutar de gastronomía como el tradicional cordero asado, entre otros.