Alicia Ortega publica ‘Fuga hacia dentro’

Investigadora. Es docente de planta de la U. Andina. Ayer presentó su obra.
Investigadora. Es docente de planta de la U. Andina. Ayer presentó su obra.

‘Fuga hacia dentro’ es su tesis doctoral por la Universidad de Pittsburg. Fue publicada por la Andina y Corregidor.

“Me interesa pensar la fuga hacia dentro para escuchar las resonancias universales de la comarca que nosotros habitamos. Me interesa poner atención a las voces, a los cuerpos, a las geografías y paisajes y a las dinámicas que habitan esta comarca que nos convoca y que nos pertenece”.

Con estas palabras, Alicia Ortega Caicedo explica lo que representa fugarse hacia dentro que, en su caso, es recorrer a la novela ecuatoriana del pasado siglo.

La autora, doctora en Literatura Latinoamericana por la Universidad de Pittsburg, está convencida de que no se debe esquivar a los distintos debates que se generan en el ámbito literario, pues uno “tiene que tratar de responder las preguntas recurrentes que genera la literatura”.

“Cada generación le da una respuesta a lo que le antecede y no hay que tenerle miedo al debate. Tener una posición es importante”, dice la académica en su oficina de la Universidad Andina –donde es docente de planta-.

Rodeada de libros y fotografías familiares, con dibujos enmarcados y afiches y postales literarias en las columnas de sus libreros, comparte que su obra, ‘Fuga hacia dentro. La novela ecuatoriana en el siglo XX’ (coeditada por la U. Andina y Corregidor) es una “investigación para pensar en cómo se ha leído a la novela ecuatoriana y, más aún, cómo ha sido apropiada por cada nueva generación, tanto por narradores, ensayistas y críticos”.

Trabajo
La obra es la tesis de Ortega Caicedo para obtener su doctorado. Si bien abarca la centuria pasada, deja en claro que “hay un proceso de selección importante” y “no se puede leer todo”.

“Están ahí los autores con quienes entro en sintonía, con aquellos que quiero encontrar filiaciones, y se evidencia de los que tomo distancia”. Así aparecen nombres como Joaquín Gallegos Lara, Jorge Icaza, Alicia Yánez Cossío, Natasha Salguero, Jorge Enrique Adoum, Eliécer Cárdenas, Agustín Cueva, Alejandro Moreano, entre otros.

También aparecen las discrepancias, como la disputa entre Gallegos Lara y Pablo Palacio, o de quienes tomarían partido por la herencia de Icaza y el legado de Palacio.

“Siempre hubo momentos de tensión y de debate entre los que defendían al realismo frente a los vanguardistas”, dice la investigadora, aunque recalca que esas contraposiciones pueden no evidenciar ciertas cosas, como el trabajo “experimental” de Icaza.

“Icaza no solo fue el escritor que trabajó sobre la obra de denuncia: el no produjo una obra chata, decir eso es muy injusto. ‘Huasipungo’ es una obra tan experimental como novedosa. Sí, hay denuncia, está el tema del indio, pero hay un trabajo con el habla popular muy interesante, con sus imágenes muy vanguardistas”.

Justamente, ella cree que el látigo que castiga al indígena dentro de la obra es expuesto por Icaza en su manera de redactar: una narrativa fragmentada, quebrada ‘a punte látigo’ -por así decirlo-.

Mirada
Concuerda con la mirada de Moreano, aquella que manifiesta que cada generación de escritores ha matado a Icaza y al realismo como rito para entrar en el escenario literario. Así como considera que “lo literario no es un paraguas frente a lo político”.

“No pienso que lo político esté sobre lo estético en nuestras novelas. Diría que está atravesado, como que contaminado en el buen sentido de la palabra, pues lo estético no está en una cápsula de cristal”.

Para Ortega Caicedo, “los escritores de la primera y segunda mitad del XX, por tradición, hablan desde varios lugares. Como intelectuales son una voz crítica en relación a su presente y su palabra está tocada por lo social, lo político, lo cultural”.

Por su parte, otras de las preocupaciones de la autora recaen en el tema de género: “Al tocar el tema de la mujer, no trato de reconocer si un autor es hombre o mujer, sino que me preocupo por la construcción de personajes femeninos o cómo la naturaleza y la otredad está feminizada”.

Sobre aquellos (entre)dichos de que no hubo –ni hay- crítica ni literatura ecuatoriana, reflexiona: “Nos leemos muy poco. Repetir clichés como: ‘Aquí no se escribe’, ‘No hay crítica’ o ‘Ecuador no tiene escritores’ demuestra lo poco que nos conocemos. Antes hubo cosas interesantes y hoy por hoy existe una generación de escritores potentes y que están circulando. Las afirmaciones son muy ligeras”. (DVD)

Perfil

Alicia Ortega Caicedo

° Escritora ecuatoriana. Nació en Guayaquil. Magíster en Letras por la Universidad Andina Simón Bolívar y PhD en Literatura Latinoamericana por la Universidad de Pittsburg.