Al revés…

Roque Rivas Zambrano

El mundo está al revés. No hace falta estar iluminado para descubrirlo. Es suficiente con poner atención a las noticias. En el presente texto, solo hablaré de dos ejemplos que acontecieron esta semana.

Uno de ellos, que tuvo lugar el jueves, en Ecuador, fue la condecoración del ministro del Interior, César Navas, con la Gran Cruz del Orden y la Seguridad Ciudadana, por parte del comandante de la Policía, el general Miguel Ramiro Mantilla.

La fecha coincidió con la finalización del plazo que instauró Lenín Moreno, presidente de la República, para la captura del cabecilla del frente Óliver Sinisterra, responsable del asesinato de tres periodistas del equipo de El Comercio, del atentado en el que perdieron la vida cuatro militares y del secuestro de dos civiles más: Óscar Villacís y Katty Vanessa Velasco. De estos últimos no se tiene noticias, desde la difusión de un un video con una prueba de vida, que circuló hace más de diez días.

El segundo ejemplo sucedió en España y se trata de la sentencia en el caso ‘La Manada’, una violación grupal a una joven en los Sanfermines de 2016. Los cinco acusados fueron condenados a nueve años de prisión por un delito continuado de abuso sexual, pero no por agresión sexual con violencia.

Este fallo causó indignación en la opinión pública. Pone en duda el testimonio de la víctima, que no tuvo más remedio que someterse para no sufrir daños mayores. Sabes que vives en un mundo al revés cuando se premia el trabajo inconcluso o cuando se culpa a las víctimas de su desgracia.

Decía Eduardo Galeano, en este mundo tergiversado, “quien no se hace el vivo va muerto. Estás obligado a ser jodedor o jodido, mentidor o mentido. Tiempo del qué me importa, el qué le vas a hacer, el no te metás, el sálvese quien pueda”.

[email protected]