‘Si la muerte de periodistas queda impune, el criminal se sale con la suya’

Expositor. Javier Garza es periodista mexicano. Colaboró con El Siglo de Torreón y Reforma. Actualmente es asesor de la Asociación Mundial de Periódicos.
Expositor. Javier Garza es periodista mexicano. Colaboró con El Siglo de Torreón y Reforma. Actualmente es asesor de la Asociación Mundial de Periódicos.

El mexicano Javier Garza es uno de los expositores del taller sobre periodismo y crimen organizado. Hoy es el Día de la Libertad de Prensa.

Ecuador no se había enfrentado de forma tan cruda a la violencia del crimen organizado. ¿De dónde debe llegar el arresto para que un miedo legítimo no termine en autocensura para la prensa?
No solamente es el hecho traumático del asesinato de los tres colegas en la frontera. Ya se estaban dando síntomas de penetración del crimen organizado. Es posible que esto haya sido una llamada de atención de los carteles buscando controlar lo que se dice de ellos, ya no solo sobre sus operaciones en zonas remotas donde se produce la droga, sino también en las ciudades, que es donde tienen impacto final. Una llamada de intimidación para que no los escarben.

Los grupos terroristas saben construir mensajes. ¿Cuán delicada es la línea que separa una cobertura sobre narcoterrorismo, de una acción no premeditada que pudiera convertirse en caja de resonancia de los mensajes de los grupos terroristas?
Efectivamente, los grupos criminales saben que la forma en que ejercen la violencia es también una forma de mandar un mensaje. Pongo un ejemplo muy grotesco. Una cosa era que un grupo criminal asesinara a una persona y dejara tirado el cuerpo en la calle. Pero si ese cuerpo estaba decapitado, el tratamiento periodístico iba a ser más prominente. Una forma de lidiar con ello es tratar de dar el mismo tratamiento independientemente del grado de violencia que se haya ejercido. El hecho de que en un titular tú omitas que un cuerpo apareció mutilado, no necesariamente implica autocensura si tú en la nota describes cómo estaba dicho cuerpo. Lo mismo ocurre con los mensajes en los cuerpos o en las mantas que aparecían en las calles de México. Una manera de hablar de ello sin caer en autocensura es mencionar que apareció un mensaje, pero no transcribirlo textualmente.

Además, habría otras formas de intimidación…
Hasta donde conozco, en Ecuador no han llegado al grado en que en las redacciones se reciban amenazas para no publicar ciertas cosas relacionadas con crímenes de narcos. Pero es probable que lo puedan empezar a experimentar, sobre todo si el asesinato de los tres colegas (de diario El Comercio) queda impune. Entonces los criminales sabrán que pueden amenazar o matar periodistas y salirse con la suya.

¿Cuán mayor es la presión para el periodismo latinoamericano en un contexto en que el poder –sea este político, económico o mafioso– ha intentado desdibujar el papel de la prensa en una sociedad libre?
Hay un deterioro generalizado de la cultura de la libertad de expresión. Así, es muy difícil esperar investigaciones sobre crímenes contra periodistas. En México, en el último lustro, hemos visto que en cada año matan a más periodistas que en el año anterior. Y el no atender esto desde un principio, cuando están empezando los crímenes contra la prensa, va a provocar una espiral de deterioro. Hace 13 años, por ejemplo, desapareció en el estado de Sonora el periodista Alfredo Jiménez Mota. Nunca más se volvió a saber de él. Y como no hubo una investigación profunda, al siguiente año hubo más periodistas secuestrados o asesinados. A lo mejor fueron pocos casos en 2005 y 2006. Pero en 2007 fueron más, en 2008 más, en 2009 más todavía… Y así llegamos al promedio de una agresión diaria contra periodistas en el último año.

Un claro mensaje para lo que vive hoy Ecuador…
Definitivamente. Pero cuando el fenómeno está empezando –y puede que no lo percibas– los periodistas tendemos a ser un poco descuidados. Las medidas de autoprotección de los periodistas son sumamente necesarias porque no hay autoridades dispuestas a garantizar el ejercicio periodístico.

¿Qué retos impone la cobertura en zonas de conflicto para el periodista que actúa como lobo estepario? Estos hechos demandan procesos colaborativos entre colegas y entre medios.
La formación de redes es crucial. En México entendimos que los medios y los colegas no éramos competencia cuando íbamos a cubrir temas del crimen organizado, porque teníamos que apoyarnos por medidas de autoprotección. (IFP)

Seminario y charla

En Guayaquil y Quito

° Los expositores: Javier Garza, exeditor de Reforma y asesor de la Asociación Mundial de Periódicos. Gustavo Duncan, académico colombiano y columnista de El Tiempo y El País. Autor, entre otros títulos, de ‘Los señores de la guerra’.

° En Guayaquil: hoy, desde las 10:00, en la fundación El Universo.

° En Quito: charla en la Udla (campus Granados), el viernes a las 10:00. Taller el sábado a las 10:00, en el hotel Mercure.

° Organizadores: Aedep y Plan V.