Luego de los cambios en el gabinete, analistas ven que se busca una renovación pero que aún es incompleta.
El conjunto de cambios que se han producido en los últimos días en el Gabinete del presidente, Lenín Moreno, demuestran su intención de dejar atrás, paulatinamente, esa “herencia” de funcionarios correístas que le han acompañado en su primer año de gestión. Eso consideran los analistas políticos Napoleón Saltos y Luis Verdesoto.
Ayer, en el Palacio de Gobierno, Moreno posesionó a Paúl Granda, quien se venía desempañando como ministro de Transporte, como secretario de la Política, en lugar de Miguel Carvajal. Eduardo Jurado asumió como secretario de la Presidencia en reemplazo de Andrés Mideros. Juan Sebastián Roldán es oficialmente secretario particular del Presidente. José Augusto Briones se hace cargo de la Secretaría Nacional de Planificación (Senplades). Richard Martínez se posesionó como Ministro de Economía. Y Boris Palacios queda como ministro (e) de Transporte.
A esto se suma que a finales de abril se designó al general (sp) Oswaldo Jarrín como Ministro de Defensa, en reemplazo de Patricio Zambrano; y a Mauro Toscanini como ministro del Interior, cargo que era ocupado por César Navas.
Saltos no duda en decir que Moreno viene consolidando su propio equipo de trabajo, con lo cual desplaza a figuras como Carvajal y Navas, que fueron fervientes correístas. “Además, está consolidando su relación con las cámaras de la producción al nombrar a Richard Martínez. No observo un diálogo con otros sectores, especialmente con los sociales, a pesar de que se habla de un gobierno de unidad nacional”, matizó Saltos.
Otra visión
Verdesoto añade que se ha cumplido un ciclo de cambios que implica la separación del Gobierno actual de esa matriz correísta inicial. “Me parece importante la inclusión de ministros jóvenes. De hecho, el de Finanzas, el de de la Política, el secretario general de la Presidencia, el secretario particular representan cuadros jóvenes de la política y también representan un alejamiento importante de su expresión inicial”, dijo.
Esto, a pesar de que cuestionan que se mantengan en los cargos figuras como Rosana Alvarado en el Ministerio de Justicia y María Fernanda Espinosa en la Cancillería, a quienes varios sectores consideran también como producto de esa “herencia correísta”. “Es todavía un proceso incompleto, indefinido. Creo que el mismo Gobierno no tiene aún definida la agenda gubernamental”, considera el anailista Verdesoto. (HCR)
El mensaje del nuevo equipo
° Eduardo Jurado, en su calidad de secretario de la Presidencia, tomó la palabra a nombre de los nuevos funcionarios. Dijo que ha sido el primer año de un Gobierno de diálogo, sensible a las demandas ciudadanas, respetuoso de las opiniones diversas, defensor de los derechos, pero, sobre todo, el primer año de un Gobierno transparente. Agregó que los nuevos funcionarios darán todo su apoyo para consolidar una gestión eficiente y responsable con los recursos públicos. “Con austeridad, buscando siempre el desarrollo de todos los sectores”, manifestó.
El presidente, Lenín Moreno, dijo que tanto los funcionarios que se mantienen en los cargos como los que entran, integran un gabinete de unidad nacional ya que son un solo equipo con vocación de servicio. Reiteró el compromiso de su Gobierno para combatir la corrupción.
FRASE
Ha pasado ya un año. Bueno, aburridos no hemos estado por lo menos; aburrido no ha sido el año”. Lenín Moreno, Presidente de la República.