Abusos sexuales: Arquidiócesis de Cuenca inicia indagación al cura César Cordero

INVESTIGAción. Dirigentes de la Iglesia en Cuenca dieron a conocer los pormenores de la indagación.
INVESTIGAción. Dirigentes de la Iglesia en Cuenca dieron a conocer los pormenores de la indagación.

La Iglesia Católica de Cuenca dio paso al proceso contra uno de sus presbíteros.

Los presuntos abusos sexuales cometidos por el padre César Cordero Moscoso, rector vitalicio de la Universidad Católica de Cuenca, han motivado que el pasado 21 de mayo el arzobispo de Cuenca, Marcos Aurelio Pérez Caicedo, decidió iniciar el proceso de indagación previa, al tenor del ‘Motu proprio Sacramentorum sanctitatis tutela’, una Ley especial que para este tipo de casos dictó el papa Juan Pablo II en 2001 y actualizó Benedicto XVI en el 2010.

Así lo informó la Arquidiócesis de Cuenca el jueves 24 de mayo mediante un comunicado, en el que se manifiesta que “la Iglesia vive con dolor esta situación que afecta a todos sus miembros”. El documento también señala que la “crisis de los abusos” requiere tener en cuenta varios aspectos como “la búsqueda de la verdad y la confianza en la seriedad del procedimiento canónico” y “el acompañamiento espiritual, psicológico y médico, si fuera necesario, a las víctimas”.

En ese comunicado se recuerda que en el contexto de Ecuador la Iglesia tiene “protocolos de actuaciones, de cumplimiento obligatorio, junto a los marcados por el Derecho canónico”. Además, estos casos serán investigados con la “ayuda de profesionales, verdaderamente expertos”, ya que, según un lineamiento de Benedicto XVI, la Iglesia está llamada a “vendar las heridas causadas por cada violación de la confianza, favorecer la curación, promover la reconciliación y acercamiento, con afectuosa preocupación a cuantos han sido tan seriamente dañados”.

En días pasados, este Diario y otros medios de comunicación publicaron parte de los testimonios de tres presuntas víctimas de Cordero, Jorge Palacios y dos hombres, de alrededor de 60 años, que prefirieron que se proteja su identidad, pero que relataron las presuntas violaciones que el religioso cometió contra ellos cuando eran niños, alumnos de la Escuela Miguel Ortiz de Cuenca. Uno de ellos, calificó como “infierno” su vida a partir de las violaciones, que se cometieron contra él desde primero a sexto grado, y de las cuales, según afirma, nunca se recuperó por lo que no descarta acabar con su propia vida. (MMD)