Luego de la exposición del fiscal general (s), Paúl Pérez Reina, la Justicia ecuatoriana aceptó el pedido de vinculación en contra del exsecretario de Inteligencia de Rafael Correa, Pablo Romero, y del excomandate de la Policía Nacional, Fausto Tamayo, al caso del secuestro del activista político Fernando Balda.
Además, es la primera vez que, en este caso, la Fiscalía declara que este secuestro fue “un crimen de Estado”, como lo ha señalado la defensa técnica de Balda durante el proceso. Lo que puede darle un nuevo giro y más implicaciones al tema.
“Fue un delito cometido desde el Estado porque ellos, en sus condiciones de funcionarios públicos, actuaron, ordenaron, que se realice el cometimiento de un delito”, argumentó Pérez Reina.
En tal sentido, la jueza Daniella Camacho dictó orden de prisión contra los vinculados. Sin embargo, se conoce que Romero no se encuentra en el país y Tamayo ya está preso, cumpliendo una condena a 13 años de reclusión, por el caso de la venta de pases policiales. Romero será buscado, según adelantaron las autoridades, mediante un pedido a la Interpol.
Los detalles de la acusación
En la opinión del Fiscal General, Romero y Tamayo son los autores intelectuales de la asociación ilícita y el secuestro contra Balda, en el marco de un crimen de Estado que utilizó fondos y funcionarios públicos para su consumación.
EL DATO
La jueza ordenó protección a los familiares de los testigos protegidos, debido a incidentes intimidatorios.Dos cheques del Banco del Pacífico, que estaban bajo reserva, por 10.000 y 11.000 dólares, se habrían entregado al agente Raúl Chicaiza, colaborador eficaz en este juicio. Pérez Reina anunció que está pidiendo la desclasificación de algunos documentos, que aún permanecen bajo reserva en la Secretaría de Inteligencia (Senain).
Aunque el mismo Balda piensa que tanto el proceso contra los autores materiales en Colombia, como el que se realiza en Ecuador, no llegan aún a quién dio la orden. “Creemos que se está dando un paso importante en la instrucción fiscal”, dijo. “Pero […] todavía no hemos llegado a los grandes autores intelectuales y estamos esperando, y ojalá así suceda, en los próximos días se vincule también al expresidente de la República Rafael Correa y que también se dicten las medidas de prisión preventiva y se notifique a la Interpol para su ubicación y captura”.
Sobre este caso, el expresidente Correa escribió en Twitter el miércoles: “La estrategia del lawfare: A un culpable confeso, le proponen ‘cooperación eficaz’, acusar a alguien para rebajarle la pena, y, así, acusa hasta a su progenitora. Se lo hicieron a Lula, se lo hicieron a JORGE (Glas). Vienen por mí. Aunque no es prueba suficiente, son tiempos cuánticos”. (MMD)