Quito, EFE
El Gobierno de Lenín Moreno activó los consulados de Ipiales y Bogotá, en Colombia, para brindar apoyo a los familiares de los periodistas secuestrados y asesinados en cautiverio, después de que las autoridades colombianas informaran del hallazgo de tres cadáveres que podrían corresponder con los de ellos.
En un comunicado emitido hoy, la Cancillería ecuatoriana informó de que ambos consulados han sido instruidos para ofrecer apoyo y acompañamiento a los parientes de Efraín Segarra, Javier Ortega, y Paúl Rivas, trabajadores del diario «El Comercio», que hoy viajaron a Cali para participar en las labores de confirmación de la identidad de los restos encontrados.
El viceministro de Movilidad Humana, embajador Santiago Chávez, ratificó hoy que los cónsules ecuatorianos de Ipiales y Bogotá se encuentran en Cali, donde tenían previsto recibir a la delegación de familiares y miembros de diferentes organismos del país.
«Este personal se encuentra a cargo de la coordinación del tema logístico, así como de las acciones a realizarse entre la Policía, autoridades de Fiscalía, Ministerio de Justicia y del Gobierno de Colombia», según señala el documento de Cancillería.
Su objetivo, es facilitar el trabajo que se llevará a cabo en esa ciudad relativa a los exámenes forenses de los cuerpos hallados en las últimas horas y que podrían corresponder a los miembros del equipo periodístico del rotativo quiteño.
«Todos los aspectos se encuentran cubiertos. Este es un caso de vulnerabilidad al que le hemos asignado prioridad en todo momento.
Vamos a seguir trabajando con las autoridades colombianas en las acciones que sean necesarias para llevar adelante los procedimientos», señaló Chávez, poco antes de partir hacia Colombia en un avión de la Fuerza Aérea ecuatoriana.El presidente de Ecuador, Lenín Moreno, confirmó hoy a través de Twitter el despacho de la «delegación oficial a Cali para verificar la información que diera ayer el Gobierno de Colombia».
El mandatario precisó que la misión está liderada por el comandante de Policía, Nelson Villegas, y acompañada por los familiares y les transmitió: «Que Dios los acompañe».
El periodista Ortega, el fotógrafo Rivas y el conductor Segarra fueron secuestrados el 26 de marzo en la zona de Mataje, en la provincia de Esmeraldas, cerca de la frontera con Colombia, y el 13 de abril las autoridades ecuatorianas confirmaron que habían sido asesinados por un grupo disidente de las FARC.
El jueves el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, informó que las autoridades de su país hallaron cuatro cadáveres, tres de los cuales se cree pueden ser del equipo periodístico.
Los Gobiernos de ambos países atribuyen el secuestro del equipo, así como de una pareja de civiles ecuatorianos en la zona de la frontera común, a un grupo disidente de las FARC, autodenominado «Oliver Sinisterra», liderado por alias «Guacho», y que asumió la autoría de esas acciones en varios comunicados y vídeos a los que las autoridades dan credibilidad.