Los refugiados judíos del nazismo en Ecuador

HOMENAJE. Vista exterior de la Casa-Museo Cultural Trude Sojka, dedicada a la artista checo-ecuatoriana, sobreviviente del Holocausto, Trude Sojka, en Quito (José Jácome, EFE)
HOMENAJE. Vista exterior de la Casa-Museo Cultural Trude Sojka, dedicada a la artista checo-ecuatoriana, sobreviviente del Holocausto, Trude Sojka, en Quito (José Jácome, EFE)

Cientos de inmigrantes centroeuropeos, huyendo del Tercer Reich, fueron protagonistas del adelanto del país. Su legado se conoce ahora.

Redacción Daniela Brik,

EFE

Hombres y mujeres judíos principalmente centroeuropeos llegaron a Ecuador como refugiados durante el nazismo y se convirtieron, sin quererlo, en sigilosos protagonistas del desarrollo económico, social y cultural del país en la segunda mitad del siglo XX.

Su legado es ahora rescatado en la primera investigación académica sobre la materia, que analiza un centenar de biografías y casos emblemáticos bajo el título de “La migración judía en Ecuador. Ciencia, cultura y exilio 1933-1945”, que se presenta hoy en Quito.

“Había entre quince y veinte de estos inmigrantes judíos sin los cuales no se entiende lo que es el Ecuador moderno”, explica a EFE su autor, Daniel Kersffeld, académico argentino radicado desde 2010 en este país, donde ha sido asesor de la excanciller María Fernanda Espinosa, que firma el prólogo.
Publicado por la Academia Nacional de Historia de Ecuador, el libro repasa la historia del judaísmo ecuatoriano, marginal hasta la llegada de aquellos que escapaban del Tercer Reich.

CULTO. Con grandes muros blancos, detrás del Hospital de San Francisco de Carcelén, la sinagoga judía de Quito se muestra sobria e imponente. (Yhury Manuel)
CULTO. Con grandes muros blancos, detrás del Hospital de San Francisco de Carcelén, la sinagoga judía de Quito se muestra sobria e imponente. (Yhury Manuel)

Importantes personalidades
“Encontré que a diferencia de otros casos, el ecuatoriano era muy particular por la época en la que se produjo, directamente en los años del nazismo, y porque entre el número reducido de inmigrantes había numerosas personalidades”, señala este licenciado en Ciencia Política por la Universidad de Buenos Aires y doctor en Estudios Latinoamericanos por la UNAM.En el período que comprende los prolegómenos de la contienda europea y la posguerra, el investigador calcula que entre 3.000 y 4.000 judíos llegaron a Ecuador, país del que muchos ni habían escuchado. Buena parte de ellos tenían una buena posición económica en sus países, títulos universitarios, en algunos casos gozaban de amplio reconocimiento profesional.

El año 1938 supuso un punto de inflexión a raíz de las agresiones a propiedades judías en Alemania, en la Noche de los Cristales Rotos, y la adopción de las Leyes Raciales en Italia.

“Los acontecimientos del 38 marcan un punto de no retorno para varios de estos judíos alemanes que fueron enviados al campo de Dachau. Los que salen tienen la convicción de que deben irse del país”, analiza. Para esa fecha la mayoría de países de América, incluido EE.UU., cerraban sus fronteras a estos judíos y uno de los pocos que todavía permitía su entrada era Ecuador, “un caso único”, dice el autor.

Figuras como el periodista Adolfo Simmonds o el ingeniero Julio Rosenstock se movilizaron para favorecer la llegada de los nuevos inmigrantes y, en 1938 se funda en Quito la primera Comunidad Judía en el país.

ACADÉMICO. Daniel Kersffeld, autor del libro sobre la migración judía en Ecuador. (José Jácome, EFE)
ACADÉMICO. Daniel Kersffeld, autor del libro sobre la migración judía en Ecuador. (José Jácome, EFE)

Terreno abonado
Aunque oficialmente las autoridades ofrecían visas para expertos agrónomos, Ecuador se convirtió en terreno abonado para el desarrollo y fomento en diversos ámbitos profesionales.

En el campo de la arquitectura y planificación urbana sobresalieron los migrantes de origen checo. Muchas mujeres que habían estudiado con artistas europeos trajeron las corrientes de vanguardia y fueron formadoras de generaciones posteriores.

En la medicina es reconocida la aportación del endocrinólogo y escritor de origen austríaco Paul Engel.

Dejando atrás a la muerte
El veterinario alemán Julius Zanders, que impulsó el desarrollo de esta disciplina o el abogado Wenzel Goldbaum, asesor de diferentes gobiernos y que promocionó el campo de los derechos de autor, son otros de los ejemplos.

Pero uno de los casos más señalados, con capítulo propio, es el de los laboratorios Life, fundados en 1940 en Quito por un grupo de empresarios y científicos italianos liderados por Alberto Di Capua, Giorgio Ottolenghi, Aldo Mugía.

Fue la primera industria farmacéutica del país y principal exportadora regional y otorgó los primeros beneficios sociales a trabajadores en Ecuador, además de dar empleo a otros científicos judíos que no hablaban español.

“Desde el mismo nombre de los laboratorios Life, que juega con la idea de la vida cuando estaban dejando atrás la muerte de los campos de concentración, está presente el tema de la supervivencia”, explica Daniel Kersffeld al incidir en el verdadero impacto que tuvo el Holocausto en los inmigrantes.

Particularidades de una comunidad
° La Comunidad judía de Ecuador es bastante peculiar, en relación con otras latinoamericanas. Casi todos los países del continente recibieron inmigración judía desde finales del siglo XIX, que escapaba, mayoritariamente, de los pogromos en Rusia. Estos pioneros fueron estableciendo las bases de sus comunidades en el campo y en la ciudad. Así fue en casi todos los países de estas latitudes, excepto, entre otros pocos, en Ecuador. Recién en el siglo XX, huyendo del horror del régimen nazi, llegaron a este país los primeros grupos de judíos. Al comienzo, la mayoría se estableció en Guayaquil. Hoy, el grueso de la población judía ecuatoriana se concentra en Quito y, en segundo lugar, en la ciudad costera.

Actualmente, hay apenas 250 familias judías en Quito, y menos de 100 en Guayaquil. Muchos de los judíos ecuatorianos, que han constituido una colectividad más numerosa a mediados de siglo XX, han emigrado en las últimas décadas a los Estados Unidos.(Delacole.com)