En la Asamblea avanza la elaboración del informe de lo que será el nuevo Código de la Salud. Uno de los temas que mayor debate genera es una propuesta para incluir regulaciones respecto del uso terapéutico del cannabis.
La iniciativa es impulsada por la correísta Gabriela Rivadeneira, que forma parte de la Comisión de Salud, encargada de redactar ese cuerpo legal. Eso, luego de que en el pasado periodo legislativo no logró que su proyecto prosperara como una ley aparte. Rivadeneira aspira a que la discusión se desarrolle “sin dogmas” y aseguró que alrededor del mundo hay mucha investigación científica que permite la comercialización de productos con cannabidiol, un componente de la planta del cannabis.
“Hay asociaciones de chicos que tienen epilepsia refractaria, por ejemplo, que están muy a la espera de la aprobación de esto, así como pacientes con cáncer en donde suplantan el uso de la morfina que causa efectos colaterales terribles para el cuerpo humano”, adujo.
333
es el artículo del Código de la Salud que trata
el tema.Criterios
A favor de esta iniciativa se pronunció Wilson Merino, vocero de la organización Acuerdo Nacional contra el Cáncer. “Defiendo, con evidencia empírica, la legalización del cannabis como herramienta para apalear el dolor y propiciar una calidad de vida digna para los dolientes”, dijo.
Sin embargo, Diego Riofrío, un doctor que forma parte de un instituto privado que trabaja en prevenir el consumo de drogas, no está de acuerdo con esa iniciativa, pues teme que al legalizar la comercialización de la sustancia se generen nuevas adicciones.
“Creo que legalizar una droga que por naturaleza altera el funcionamiento del sistema nervioso central y es causante de adicciones no es nada medicinal”, opinó.
El presidente de la Comisión de Salud, el oficialista William Garzón, que también es médico, descartó que el cannabidiol produzca adicciones y puntualizó que “es falso” que con el Código se vaya a autorizar la legalización de la marihuana para uso recreativo.
A finales del año pasado, el Comité de Expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en Farmacodependencia concluyó que, en estado puro, el cannabidiol no parece ser nocivo ni tener riesgo de abuso. (RVD)