La chismografía, veneno del alma

ATILIO RUGEL ALBÁN

«Chismes llegan a causar/disgustos y hasta tendencias/aconseja la experiencia / nunca con chismes andar» (J.J. Olmedo). El 03/06/18 Carlos Muñoz Gallardo escribió un artículo poco común titulado ‘Efecto nocivo del chisme’ que lo leí con mucho detenimiento y que al interpretarlo me impulsó hacer un comentario, con la finalidad de ver si se logran enderezar conductas torcidas acostumbradas a mal informar, constituyéndose en eternos odiadores contra el prójimo que alguna vez lo expresé y que lo único que consiguen es dañar su salud, porque casi siempre toda persona contra la que lanzan calumnias e improperios, ignoran lo que contra ellos se dice y por eso el mal se revierte sobre los que profanan la verdad.

Parece que esa cadena de debilidades tiene su formación en el hogar, que los mantiene encerrados en sus propias cárceles interiores enarbolando el virus de la desconfianza. Da pena, por estos insignificantes seres humanos con mentalidades retrógradas, que pierden el tiempo en cosas baladíes e ignoran que quienes los escuchan hace rato los ubicaron como mediocres en la sociedad, porque responden a la envidia o el dolor de ver progresar a los demás con su trabajo dignificante. Por lógica y sentido común una persona que habla mal de los demás no es confiable ante sus congéneres, porque saben que también hablará mal de ellos a los que les finge amistad al frente de otros.

Un ser humano con sus cinco sentidos bien puestos focalizará su atención en ver virtudes ajenas, exaltando valores y potencialidades de los otros y de esta forma se logra el crecimiento de quienes ellos hacen sus víctimas y que lo único que consiguen es descalificarse ante los oídos de sus escuchas. Considero importante el mensaje que da el periodista, porque ahora que la sociedad vive una etapa de decadencia y la corrupción escandaliza al mundo, todos debemos eliminar estas etapas negativas sin ninguna objeción, ya que al no hacerlo causa desunión y división en las raíces de la sociedad.

No olvidemos, que muchos crímenes se han dado, que muchos hogares se han destruido, que muchas instituciones se han perdido en el camino de la incomprensión porque los encargados de dañar el buen camino se convierten en parlantes de la maldad. Termino con los versos que escribió el poeta Antonio Preciado por el problema político de Chile que tituló: ‘Los cuatro generales y el poeta, que decía: «Es como aquel que escupe para arriba / y se le viene abajo el firmamento / y un gran chorro de luz se precipita / sobre la baba oscura de la bestia”. Cuidado suceda eso con los calumniadores, chismosos y odiadores de oficio.