Debaten colapso de civilización en Isla de Pascua

MOÁIS. En la isla existen casi mil de estas esculturas.
MOÁIS. En la isla existen casi mil de estas esculturas.

Redacción WASHINGTON, EFE

Un grupo de científicos ha debatido la tradicional narrativa del colapso de la antigua sociedad de la misteriosa Isla de Pascua, que sugiere que desapareció por batallas internas, de acuerdo a un estudio publicado en la revista especializada Journal of Pacific Archaeology. La teoría consensuada hasta ahora defiende que la población de esa isla desapareció en la década de 1860 por una serie de episodios devastadores, incluyendo luchas internas y el abuso de sus recursos naturales.

Sin embargo, un equipo internacional de investigadores analizó la composición química de las herramientas utilizadas para crear las icónicas estatuas monolíticas de piedra de la isla y encontró pruebas de una civilización «sofisticada en la que las personas colaboraron y compartieron información».

El autor principal Dale Simpson, arqueólogo de la Universidad de Queensland (Australia), sostiene que la idea de la competencia desenfrenada y el colapso en la Isla de Pascua «puede haber sido exagerada» por otras investigaciones.

«Para mí, la industria de talla de piedra es una prueba sólida de que hubo cooperación entre las familias y los grupos artesanales», dijo Simpson, contrariamente a lo establecido anteriormente sobre esta isla de Chile ubicada en la Polinesia, en medio del océano Pacífico. Existen en la isla casi mil de estas esculturas, conocidas como moáis, que representan importantes antepasados y que puede llegar a medir hasta 21 metros de altura.

Para su estudio, los investigadores examinaron herramientas hechas de basalto de piedra volcánica encontrado durante las recientes excavaciones de cuatro estatuas en la región de Rano Raraku, la cantera de la que se sacó el material.

Los resultados del análisis químico de estas herramientas, conocidas como toki, sugieren un alto nivel de colaboración en la producción de las estatuas.
«La mayoría de los toki provenían de un complejo: una vez que la gente encontraba la cantera que les gustaba, se quedaba con ella. Para que todos usen un tipo de piedra, creo que tuvieron que colaborar y por eso tuvieron tanto éxito», relató Simpson.

El autor principal argumentó que este nivel de cooperación a gran escala contradice la narrativa popular de que los habitantes de la isla se quedaron sin recursos y se destruyeron a sí mismos por culpa de guerras, aunque no ofreció una teoría alternativa sobre el fin de esta civilización.