Un vergonzoso episodio

Vergonzosa e insultante fue comparecencia del expresidente Rafael Correa ante una comisión de la Asamblea Nacional en la investigación que se sigue por el caso del asesinato del general Jorge Gabela. Nunca antes se ha visto un espectáculo tan denigrante y bochornoso. Sus llamados al respeto y a la dignidad en tiempos de su mandato, se han develado como un comportamiento eminentemente patológico.

Lo rescatable del nefasto episodio es la evidencia de que en este, como en otros casos que le incluyen, el cabecilla de la actual disidencia de Alianza PAIS siempre estuvo involucrado de alguna manera con los asuntos más oscuros y de evidente presunción delictiva de la pasada década. Ya no solo se trata de casos de corrupción. Su irrespeto, prepotencia, burlas e invectivas apuntan en otras direcciones.

La baja calidad moral de sus argumentos es a todo punto deplorable ante un caso tan sensible como el del general Gabela. ¿Qué pasará cuando tenga que referirse, siempre desde el exterior, a otros de los problemas judiciales en los que está, de una u otra manera, involucrado? Mientras tenga el escudo protector del exilio nada diferente a lo ya visto habrá de suceder, a menos que se produzca un justo milagro.

Correa y sus seguidores más contumaces eluden un debate plural y abierto sobre lo ocurrido en la década en la que tuvieron en sus manos todas las funciones del Estado. Son conscientes de su responsabilidad en el ocultamiento de acciones y omisiones en los que la Constitución y las leyes fundamentales que nos rigen fueron ignoradas, por no decir manipuladas y casi siempre pisoteadas.


La esperanza es el único bien común a todos los hombres; los que todo lo han perdido la poseen aún”. Tales de Mileto Filósofo y matemático griego (624 AC-546 AC)

La esperanza del bien es ya un gran bien”. Constancio C. Vigil Escritor y periodista uruguayo (1876-1954)