Calles, bordillos, aceras y plantas

Parte de la elegancia y de la fisonomía estructural y ornamental de una ciudad, es la buena imagen que presenta a los ciudadanos que en ella conviven y que la visitan diariamente. De buen gusto es observar los parques y jardines (seudos) así como los parterres y adornos en la vereda que se prestan para ello. En tiempos remotos nuestra ciudad fue admirada por el cultivo de bellas y hermosas plantas que lucían en los patios, en los balcones y en jardines que servían de deleite para propios y extraños. Los tiempos cambiaron y la belleza de la naturaleza y las manos prestas y delicadas de muchas personas se perdieron, solo nos queda a muchos la reminiscencia de los tiempos hermosos que nos cupo la suerte de vivir y disfrutar en Esmeraldas.

Cuando viajamos y llegamos a Quinindé es otra la fisonomía que observamos y gustamos apreciar sobre todo en los parterres más aún en Santo Domingo de los Tsáchilas y qué decir de la entrada de San Lorenzo. En la costa nos deleitamos en Portoviejo, Guayaquil, Machala por la escenificación paisajística y ornamental que nos brinda la bien concebida idea de arreglar, cuidar y embellecer la ciudad. En nuestra ciudad son admirables las calles Eloy Alfaro y 6 de Diciembre unas cuantas cuadras, en cuyos parterres hay el cultivo de plantas y flores que embellecen grandemente y brindan un aspecto que no parece Esmeraldas; en la calle Olmedo y 10 de Agosto fueron sembradas y cultivadas un manojo de plantas por un respetable caballero de nuestra ciudad

Qué pena que no existan parques llamativos en nuestra urbe, no hay cultivo de las plantas, no se riega lo poco que quedó de la administración anterior en el parque 20 de Marzo y en la Plaza Cívica sobreviven de milagro unas que otras. ¿De qué cultura nos hablan aquí? Me permito sugerir que le corresponde al Municipio encargarse del riego y cuidado de lo sembrado, se debe contratar un vehículo para que se riegue lo plantado, así se lo hace en otras ciudades de nuestro país en donde se aprecia el verdor, las flores, los árboles; imitemos lo bueno. Cuando sembramos los guayacanes frente a la Plaza Cívica quienes conformamos el grupo Nelson Estupiñán Bass, me encargué de regarlos durante la noche, crecieron, pero falta la irrigación de rigor. ¿Acaso a las plantas no les da sed? ¿No tienen vida?

A lo mejor como en el centro de la ciudad no hay votos, pero sí en otros sectores planos y altos, las calles, veredas y bordillos dan lástima y