¿A dónde va la tecnología?

POR: Manuel Báez R.

Es maravilloso ponerse a razonar sobre muchos inventos que recibe la humanidad de parte de los estudiosos de la más alta tecnología; especialmente tenemos productos electrónicos que nos sorprenden brindando comodidad y bienestar para todos, lo que consideramos noble y digno del ser humano.

La tecnología cada vez nos asombra con nuevos alcances que la creatividad descubre: desde lo más pequeño de lo pequeño hasta lo más grande de lo grande; es decir, parece ser todo infinito, hasta lo no manifiesto: desde aquí hasta aquí, desde el Yo hasta el Yo hasta el yo. Desde una semilla hasta otra semilla, desde la plenitud hasta la plenitud. En definitiva, es más que la palabra que tiene muchos significados. No sabemos hasta dónde nos conduce la tecnología con un sinnúmero de inventos, todos en beneficio del hombre.

En este campo, personalmente casi tengo la seguridad, que toda la inteligencia del universo es capaz de reaccionar ante el desarrollo de la mente humana. La integridad de la naturaleza se altera pero en beneficio de la misma humanidad.

Hace pocos días visité a un familiar muy cercano, tuve la oportunidad de admirar el funcionamiento de un invento de última generación. Se trata de un pequeño aparato electrónico llamado “Alexa”, de forma cilíndrica, de 20 centímetros de longitud y 5 centímetros de diámetro, los extremos planos. Lo interesante es que cumple inmediatamente la orden que verbalmente le da la persona que maneja este equipo, por ejemplo, le dice que cambie a música popular, que abra la puerta de ingreso a la habitación, que reactive la alarma de la casa, etc., etc.

Personalmente creo que toda la humanidad se hace la misma pregunta: ¿A dónde nos lleva la tecnología?