Los fuertes terremotos son más probables en Luna nueva o llena

FENÓMENOS. Grandes terremotos, como el de Maule (Chile) en 2010, se die-ron en momentos de una gran amplitud de la fuerza de marea alta. (Foto: EFE)
FENÓMENOS. Grandes terremotos, como el de Maule (Chile) en 2010, se die-ron en momentos de una gran amplitud de la fuerza de marea alta. (Foto: EFE)

Los expertos hallaron una correlación entre las fuerzas de marea y los sismos.

elheraldo.co

Científicos hallaron una correlación entre las fuerzas de marea y los grandes terremotos, aunque no lo detectaron con eventos sísmicos pequeños.

Los grandes terremotos son más probables cuando hay mareas altas o vivas, es decir, en fases de Luna nueva o llena, indica un estudio publicado recientemente en Nature Geoscience.

Un equipo dirigido por el académico Satoshi Ide, de la universidad de Tokio (Japón), llevó a cabo experimentos que ofrecen pruebas prácticas de este fenómeno, que hasta ahora se intuía, pero sin que se hubiera demostrado.

Ide y sus colegas recrearon el tamaño y la amplitud de la ‘fuerza de marea’ -un efecto de la fuerza de la gravedad que es responsable de la existencia de las mareas- que hubo durante las dos semanas anteriores a varios grandes terremotos (con magnitudes de 5,5 o superiores).

Los científicos descubrieron una correlación entre las fuerzas de marea y los fuertes movimientos telúricos.

Comprobaron que grandes terremotos, como el de Sumatra (Indonesia) en el año 2004, Maule (Chile) en 2010 y Tohoku-oki (Japón) en 2011, se presentaron en momentos de una gran amplitud de la fuerza de marea alta. También, se dieron cuenta de que la proporción de grandes terremotos, en comparación con los fenómenos de menor magnitud, aumenta en relación a los incrementos de la amplitud de la fuerza de marea.

Pero no hay que olvidar que la naturaleza es impredecible.

Todavía sin explicación
La ciencia todavía no ha podido explicar totalmente cómo se inician y se desarrollan los potentes terremotos, pero se cree que crecen en cascada a partir de una fractura pequeña que se convierte en una gran grieta.

Los autores señalan en Nature Geoscience que, si esto es así, su estudio indica que la probabilidad de que una pequeña fractura progrese hasta convertirse en una gran grieta aumenta durante las mareas altas o vivas. Así, un mayor conocimiento de la fuerza de las mareas en regiones sísmicas podría contribuir a una mejor predicción de la probabilidad de terremotos, afirman.