Muerte violenta en la cárcel de El Inca causa conmoción

Redacción QUITO

Con un operativo especial se ingresó esta mañana al pabellón «La Tola» del Centro de Detención Provisional de El Inca, al norte de Quito. Allí se procedió al levantamiento del cuerpo sin vida de Pablo Arias Chávez, que según el parte policial se lo encontró a las 05:55, ‘semisuspendido de una cuerda’.

La muerte del recluso causó conmoción tanto a nivel interno como en los exteriores de la cárcel con las familias que madrugan para visitar a los detenidos.

El pabellón «La Tola» es identificado como uno los más conflictivos, lo reconocen las autoridades en el mismo parte policial. Los familiares de los detenidos en los exteriores del centro lo confirman.

Malestar

Sin revelar sus nombres, los familiares de los internos denuncian que no hay tal rehabilitación de los presos en este sitio, que hay celdas con tres y cuatro detenidos, pero otras que tienen hasta diez. “Al que viola en la calle aquí adentro lo violan”, comentan.

Ellos declaran que para permanecer al interior de la cárcel los ahora detenidos tienen que pagar por la estadía y también por su seguridad. Se les abre una cuenta para que depositen primero $60 dólares y luego dependiendo del pabellón hasta $12 dólares semanales.

Los familiares relatan que para ingresar tienen que hacerlo con sandalias, si no llevan en los exteriores hay personal que los alquila por un dólar. Son dos horas de visita las que tienen los internos. Ellos reciben a sus familiares en una especie de patio, no pueden ingresar alimentos. (PSD)