La ropa también contamina

El poliéster y el nylon, materias primas, son derivados de petróleo y terminan contaminando las fuentes de agua.

La mayoría de personas no sabe que la ropa que usa a diario se mantiene en el planeta muchos cientos de años después de haberla desechado, debido a la materia prima que se utiliza para su confección y que la hace más barata. También hay que tomar en cuenta el uso de varios cientos de litros de agua para su fabricación y los medios requeridos para su transportación local e internacional, para que lleguen a las perchas de los almacenes y luego al ropero personal.

Melani Valencia, especialista en economía circular y postulante a un PHD en la universidad KU Leuven (Bélgica), asegura que la mayoría de las prendas de vestir que las personas lucen a diario están confeccionadas no solo con algodón, sino también con un alto porcentaje de poliéster y nylon. Estos materiales se derivan del plástico, producto que se obtiene del petróleo.

Esto no se degradará ni desintegrará cuando se deja en la basura común, y que al igual que sucede con el plástico, “se quedará ahí” cientos de años. Mientras tanto la lluvia que le cae ocasionará el desprendimiento de los microplásticos del poliéster y del nylon que serán arrastrados y terminarán en las corrientes de agua, que al final llegan al mar.

Pero además con el uso diario y el proceso de lavado, la ropa se va desgastando, lo que significa el desprendimiento de los microplásticos que tienen el mismo final, las fuentes de agua.

Entonces, añade la experta, la mayoría dona, regala, hereda o convierte la ropa en limpiones y, sin saber, extiende su vida útil. Sin embargo, ¿cuando ya está bien viejita, qué hacer?

Valencia responde que “no hay respuesta en el país, pero asevera que hay empresas en otras naciones que recuperan ese material para posibles arreglos, deshilachar o, dependiendo del estado del material, para hacer otras prendas.

Entonces, apunta que además de enseñar a la gente a reciclar, se debe instruir a cómo consumir y saber comprar cosas de calidad y con responsabilidad. (CM)

• Para la producción de una camiseta se usan 2.500 litros de agua. Cada vez que se lava la ropa se va desgastando y al mismo tiempo se provoca el desprendimiento del micro plástico que termina en las fuentes de agua.

• Las fibras más aconsejadas y de menor impacto ambiental son: algodón, cáñamo, lino, procedentes de agricultura ecológica, o nylon y poliéster, pero reciclados. En la etiqueta se leerá el material usado.

• Los jeans son confeccionados con tela poliéster, la que más contamina y la que más se utiliza por ser barata. Para elaborar un pantalón que pesa un kilo se usan aproximadamente 10.000 litros de agua.

• De toda la industria textil a escala mundial, solo el 8% de poliéster es el resultado de material reciclado y el resto es materia prima que sale de la extracción petrolera y es convertida en ropa.