El cantón más joven de Chimborazo es Cumandá. De hecho, cumplió el lunes 27 años de haber sido elevada a esa categoría.
Desde Riobamba se emprende un viaje de aproximadamente tres horas por un carretero que en ciertos puntos no está en buen estado, pero vale la pena cruzarlos para disfrutar de lo que ofrece la ciudad a la que llaman la ‘Princesa de Chimborazo’, que está bañada por los ríos Chimbo y Chanchán, los cuales se han convertido en la frontera natural con el cantón Bucay, perteneciente a Guayas. Es en estos afluentes donde el turista practica tubing y kayak.
Mientras que sus cascadas la ‘Chorrera del diablo’, con una altura aproximada de 25 m en caída libre, y el ‘Encanto de la princesa’, con aguas cristalinas que vienen del páramo de la Sierra, se prestan para disfrutar del trekking, descender por las cascadas o por las rocas que están al lado y cruzar paredes de roca de un sitio a otro, en lo que se llama ‘vía ferrata’. Todo esto valiéndose de pasamanos y cadenas sujetos a la pared rocosa.
Producción
Cumandá es una hermosa ciudad que posee paisajes propios de la Sierra y la Costa. Tiene un parque central adornado con coloridas flores, donde se concentran jóvenes y adultos y el turista llega para orientarse de mejor manera y emprender sus aventuras.
En las hosterías cercanas se ofertan paquetes de turismo que comprenden los deportes extremos, caminatas, senderismo, cabalgatas y un enriquecedor recorrido por zonas agrícolas y ganaderas.
Con estas últimas se quiere demostrar que su clima, que oscila los 20 grados centígrados, ha permitido tener suelo fértil que ofrece el banano orito, el plátano rosado, el cacao, el tabaco, la caña de azúcar y el palmito, que son productos de exportación.
En la parroquia Suncamal, que cuenta con una iglesia construida el siglo pasado, con madera de limón, aún existen trapiches de donde se saca el jugo de caña y se destila licor. Además, se elabora la panela y la melcocha. ‘Este es un dulce recorrido’, dicen los visitantes.
Hospedaje
En Suncal, a 15 km de Cumandá, está la hostería del mismo nombre, donde, según su administrador Jimmy Yánez, el visitante disfruta de un puente tibetano, escala por un muro, se recrea en el bicibalcón construido en las alturas, desde donde toman fotos de la naturaleza que le rodea; y al lado está un columpio que invita a volar por los aires.
Aunque el invierno, con bastante humedad y neblina impera en la zona, no deja de recibir turistas que llegan a disfrutar de ese clima junto a una taza de café y unos buenos patacones, asegura Yánez. Recomienda llevar ropa cómoda, un abrigo impermeable y, sobre todo, las ganas de una buena diversión.
En esta hostería el visitante observa de cerca la extracción del jugo de caña en un trapiche artesanal y aprende a elaborar melcocha y caña. (CM)
Gastronomía
° El caldo y seco de gallina criolla, la fritada, una buena bebida de caña y las melcochas son las principales ofertas a la hora de alimentarse.
También, las frutas que se dan en el lugar forman parte del menú, y quien desee, durante los recorridos por los sectores agrícolas puede disfrutar de un vaso de leche recién ordeñada.
Costos
Por persona
° 1 día de diversión completa, incluida alimentación, por 23 dólares
° 45 dólares es el costo de dos días de diversión y una noche de hospedaje en la Hostería Suncamal.