Un total de 42.880 dólares en multas tendrá que pagar la compañía Furukawa Plantaciones C.A. del Ecuador como parte de las Resoluciones de Sanción que han dispuesto las direcciones regionales del Trabajo y Servicio Público de Guayaquil y Portoviejo. Así lo informó ayer el Ministerio del Trabajo a través de un comunicado oficial en el que además se anunció que se ha pedido la clausura de los establecimientos de esas jurisdicciones.
Los resultados se conocieron un día después de que la Defensoría del Pueblo presentó públicamente un informe en el que evidenciaba maltratos laborales y violaciones a los Derechos Humanos de quienes laboran para la empresa que exporta fibra de abacá al exterior.
Según el documento emitido por el Ministerio del Trabajo, en las inspecciones se pudo identificar “varios incumplimientos a los derechos de los trabajadores como la falta de afiliación y contrato de trabajo, falta de pago de beneficios sociales, pagos inferiores respecto a la remuneración básica unificada, intermediación, condiciones de trabajo infrahumanas, trabajo infantil, insalubridad, riesgo laboral, falta de entrega de ropa y herramientas de trabajo, accidentes laborales, personas de la tercera edad, utilidades no reconocidas, reglamento de trabajo obsoleto y no pago de horas extras, entre otros”.
Con respecto a la resolución de esa cartera de Estado y sobre el informe de la Defensoría, el gerente general de la empresa, Marcelo Almeida, respondió a través de un comunicado que se respetarán las disposiciones de clausura y que se han iniciado “mejoras sustancial de los campamentos y viviendas de los empleados”. Además confirmó que en su nómina cuentan con 198 trabajadores directos, pero también laboran con “proveedores independientes que a su vez son los patronos y responsables de la condición de sus trabajadores”.
A pesar de que la Defensoría ha señalado que en su informe hay suficientes pruebas de la negligencia de la empresa y la “esclavitud moderna”, desde 1963, el Gerente señaló que las versiones son incompletas y promovidas con fines económicos. (PCV)
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