A pesar de que hubo un considerable aumento en la última década, esto no ha sido suficiente.
“El aumento del monto invertido en infraestructura no redundó en una mejora amplia en la calidad de la red vial, de instalaciones hospitalarias y hasta de proyectos hidroeléctricos. El país sigue a la cola sobre resultados eficientes en inversión pública”. Esta es una de las principales conclusiones sobre Ecuador en el informe ‘Inversiones en Infraestructura en América Latina’, elaborado por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe.
Este mal desempeño (a pesar de que la inversión, solo en vialidad, se sextuplicó hasta llegar a los 8.440 millones de dólares entre 2007 y 2017) se debió a que la mayoría de las obras se llevaron a cabo “sin una adecuada planificación ni estudios de factibilidad; además con decisiones sin criterio técnico, sino político”.
Así, aunque en promedio, solo el 23% de la red vial en la región no está asfaltada, en Ecuador la relación se invierte, pues el 70% de la red vial nos está asfaltada, lo está parcialmente, o la calidad del pavimento es mala, con lo que se debe realizar trabajos constantes de mantenimiento.
Corrupción y despilfarro
Una de las razones de esta realidad es que las obras se enfocaron en las grandes vías, pero ni siquiera en las más prioritarias, como la autopista Quito-Guayaquil. Además, se dejaron de lado, en la mayoría de los casos, a los caminos secundarios y terciarios, que en el país representan el 85% de la red vial.
En una muestra analizada de 48 proyectos viales construidos entre 2007 y 2017, se pudo verificar sobreprecios en 41 casos. Estos incrementos de costos estuvieron en los rangos del 26% hasta superar el 260%, como ocurrió en la rehabilitación de la vía El empalme-Celica-Alamor.
EL DATO
Ecuador tiene menos de la mitad que la inversión anual en infraestructura de países como Perú, Panamá o Colombia.Otra obra con un enorme aumento de costo fue la terminación de la reconstrucción de la Troncal Amazónica Puyo-Macas. El presupuesto final fue un 251% más alto que el inicial. Así también, en el caso de la vía Pifo-Papallacta, el costo final fue de 1.362 millones, mientras el costo inicial fue de 654 millones.
Entre las cinco empresas más contratadas, durante la década analizada, están Hidalgo & Hidalgo, Cuerpo de Ingenieros del Ejército, Fopeca, Verdú, Consermin, Cosurca. Esta última empresa estuvo vinculada al caso conocido como ‘El gran hermano’, relacionado a los contratos de Fabricio Correa, hermano del anterior Presidente de Ecuador.
Por el lado de otro tipo de infraestructuras como hospitales, los sobreprecios promediaron el 65%, y en algunos de los casos, hasta la fecha, no funcionan a completa capacidad. Entre los casos más emblemáticos están los hospitales Monte Sinaí, Guasmo Sur, Esmeraldas Sur y Portoviejo.
Finalmente, a pesar de que el país también realizó grandes inversiones en el sector hidroeléctrico, los problemas de sobreprecios, fallas estructurales y demoras en la terminación de las obras, son un reflejo de los mismos problemas de falta de planificación, manejo político y despilfarro. (JS)
Región con bajos niveles de inversión
° “Observamos un retroceso generalizado en la inversión en infraestructura en América Latina y el Caribe”, afirmó Carlos Guimaraes, coordinador del Sector Privado del BID. “Más preocupantemente, otras regiones del mundo han aumentado esta inversión, medida como porcentaje del Producto Interno Bruto (PIB)”, acotó.
Esto significa que crecemos más lentamente, tanto por la reducción de la dotación de infraestructura por trabajador, como por la pérdida de mercados a manos de regiones competidoras que producen y transportan más económica y rápidamente que muchos países de Latinoamérica.