DAVID ALMEIDA GARCÍA
El mexicano Alfonso Cuarón, ganador del Óscar a Mejor director este año por ‘Roma’, en una entrevista dijo que lo más importante de un filme es su guion. Algo que lo confirma con creces la comedia romántica ‘Cuatro bodas y un funeral’, que este 11 de marzo celebra 25 años de su estreno y que desde aquel entonces se convirtió en un clásico de la comedia romántica.
Esta cinta británica, dirigida por Mike Newell y que contó con Hugh Grant y Andie MacDowell como la pareja protagonista, consiguió dos nominaciones al Óscar a Mejor película y Mejor guion, además de varios reconocimientos en 1994 (otorgados en 1995), como cuatro premios Bafta, un César y un trofeo del Sindicato de Guionistas de Hollywood, por mencionar algunos.
Tan laureado libreto estuvo a cargo de Richard Curtis (‘Un lugar llamado Notting Hill’, ‘El diario de Bridget Jones’ o ‘Realmente amor’), quien con ‘Cuatro bodas y un funeral’ le dio un aire fresco a la comedia, un género cinematográfico muy explotado por Hollywood.
Es que el guion tiene un muy bien estructurado visionado coral que disecciona interesantemente un humor algo corrosivo que critica de manera genial a la institución matrimonial y las relaciones de pareja.
Sí, el humor que le imprime Curtis en su libreto está plagado de una ironía ácida y atrevida que ha sido muy bien aprovechada por el director Newell, quien a su vez cuenta con un elenco carismático que interpreta a inolvidables personajes, inmersos en una serie de situaciones hilarantes y hasta connmovedoras, enmarcadas en cinco actos religiosos: cuatro bodas y un funeral.
Encuentros y desencuentros
EL DATO
Esta película llegó a Ecuador en agosto de 1994. Esta comedia, además, fue innovadora porque consiguió no caer en los tópicos del género y nos mostró un romance alejado de las cursilerías, matizado con una banda sonora muy selecta, que cuenta con una canción resucitada como ‘Love is All Around’, interpretada por Wet Wet Wet, además de las acertadas melodías ‘But Not for Me’ (Elton John), ‘Your the First, My Last, My Everything’ (Barry White), ‘Can`t Smile Without You’ (Lena Fiagbe) o ‘The Right Time’ (I To I).
‘Cuatro bodas y un funeral’ es una cinta digna de elogios, su comedia es accesible para todo tipo de público y a pesar que es una película más dedicada a hacer las delicias de adolescentes, lo cierto es que sabe complacer a todo tipo de espectador, incluso al más rígido y distante de este género.
Los estremecedores versos de Auden son el contrapunto perfecto a una de las mejores comedias románticas de los últimos años”. Daniel Andreas FilmAffinity
La película nos cuenta la historia de Charles (Grant) y sus amigos, todos ellos solteros y sin compromiso, pero han llegado a una edad en la que casi todos sus conocidos se han casado. En una de las bodas, a la que el grupo ha sido invitado, Charles conoce a Carrie (MacDowell), una estadounidense de la que se enamora a primera vista. Esa noche la pasan juntos, pero no vuelven a verse. Tendrán que esperar a la siguiente boda, en la que Carrie le presenta a su prometido.
Como se ve, asistimos al encuentro y las separaciones de la pareja protagonista. No solamente se trata del clásico ‘chico conoce a la chica’, que se enamoran, se separan y se vuelven a encontrar. Los detalles están cada vez que ellos se ven, en las situaciones, los lugares y los diálogos.
No habíamos escuchado tan interesantes conversaciones desde la también comedia ‘Cuando Harry conoció a Sally’, de 1989.
Interpretaciones
Hugh Grant está perfecto en la matizada interpretación que hace de un personaje que requiere tacto, sensibilidad y una acertada modulación en el gesto y la expresión para no caer en la caricatura. MacDowell no se queda atrás al presentarnos a una chica guapa con mucho carácter y aparente seguridad emocional, que esconde vulnerabilidad.
Y en cuanto a los demás miembros del elenco, destacamos las participaciones de Kristin Scott Thomas (grandiosa), Simon Callow, James Fleet, John Hannah y, de manera peculiar, la aparición de Rowan Atkinson (Mr. Bean) en una de las bodas. Es tan divertida.
Y bueno, esta comedia llega a sus ‘bodas de plata’ y muchos ya se sentirán algo viejos. Pero lo bueno es que se trata de un clásico de la comedia romántica, que hizo sobresaltar a este género.