Volamos en el tiempo y los recuerdos para perennizar en estos momentos que la vida nos depara, para sintetizar las páginas de la existencia de mujeres forjadoras por sus ideales y derechos. Este mes que acoge una fecha universal cual es el 8 d Marzo patentiza la presencia del ser batallador que se levanta airoso a través del tiempo y de la historia y que brega incansablemente por el devenir de mejores días.
Clara Zhethink perenniza a la mujer aguerrida y valiente que patentizó la protesta airada por las obreras textiles que sucumbieron en Norteamérica volcándose por la consolidación de nuevos paradigmas que inserten el debate feminista en todos los ámbitos, ideas que vinculen la economía con la historia, con las comunicaciones, con la política, con la pobreza, con la injusticia, con el discrimen, con renovadas políticas públicas, con la macroeconomía, con sociedades más igualitarias.
El rol nuestro debe considerar los derechos específicos, la necesidad de la participación y de la importancia de fomentar la valoración y autovaloración, la labor de capacitación y formación en el desarrollo de una conciencia de género. Os entrego la memorable fecha del 8 de marzo en que la mujer hizo y hace presencia a través del tiempo y de la historia.
La amable y dulce compañera del hombre ha jugado el rol preponderante de la vida en la humanidad encarnando su imagen en las ciencias, las artes, las virtudes y hasta en menesteres señalados por la sociedad, ha sido y es motivo para la distinción y enaltecimiento por sus méritos como ama de casa, que cumple con toda fidelidad y exactitud sus deberes de madre, esposa e hijas.
Las sagradas páginas de la historia han conservado y transmitido el nombre de muchas mujeres ilustres por su valor y significación especial, por su ejemplo de acción en la humanidad, por su elevada voz de altives y lucha contra la ignominia, falacias, atropello a la dignidad humana y justeza por la reivindicación de los obreros y los pueblos; enaltezcamos el liderazgo, su participación en los diferentes ambientes ciudadanos, su humanismo, el grito de justicia y libertad.
Su entrega por lograr la derrota a la ignorancia desde la cátedra, enaltecer su trabajo diario en el campo, en la ciudad, aplaudirla frente a la máquina industrial, comercial, agrícola, respetarla como guardiana del orden y la seguridad policial y militar, abrazar a la obrera, campesina, empleada, profesional, religiosa.