¿Quién no ha soñado en pisar la Luna?

Marlon Tandazo Palacio

De grande seré astronauta, fue el sueño de quienes nacimos en los 70s y vimos –aunque sea en la Vistazo del abuelo- las fotos del primer hombre en la Luna. Las novelas: La vuelta al mundo en 80 días, Veinte mil leguas de viaje submarino o Viaje al centro de la tierra, -entre otras- inmortalizaron al francés Julio Verne, escritor futurista del siglo IXX.

Verne inspiró a ecuatorianos a finales del siglo IXX y principios del XX, a escribir novelas de ficción adaptadas al contexto nacional. Estas obras han sido rescatadas del baúl del olvido y compiladas por nuestro buen amigo, catedrático universitario y entusiasta de la ciencia ficción, Iván Rodrigo-Medizábal. “Imaginando a Verne”, es parte de la campaña ciudadana de lectura Eugenio Espejo.

Me divertí leyendo a Francisco Pablo Icaza y su obra Un viaje prometido, que narra “desde su propia experiencia como citadino porteño”, la aventura de embarcarse río adentro a una fiesta popular montubia. Otra entretenida obra es, Un viaje de prueba de Alberto Arias Sánchez, que cuenta con detalles el viaje espacial iniciado en Guayaquil en un “cóndor de acero”. Viaje alrededor del mundo en 24 horas, es otra amena obra del escritor Francisco Campos Coello, quien relata la aventura en un globo que recorre París, New York, Australia, pasa por el Chimborazo y aterriza en Guayaquil. A estas novelas se suman las de José Antonio Campos: La isla de locos, La corrección de pruebas y Amor de astrónomo. Se destaca la obra, Astronomía del alma del autor Manuel Gallegos Naranjo. Y otras novelas como: Semana de los tres jueves, Estudios astronómicos y El mar, del autor Francisco Campos Coello.

Muchos ignorábamos que la literatura ecuatoriana guardaba a nuestros propios “Verne´s”. Bien por el rescate de estas narrativas y felicitaciones a Iván por plasmar “Imaginando a Verne”. (O)

@marlontandazop