Una lección extraña

MANUEL BÁEZ R.

Constantemente vemos que la ciencia avanza de una manera espectacular, trayendo muchas cosas al alcance de nuestros sentidos, al punto que en la actualidad ya es posible escuchar sonidos provenientes del espacio exterior, mientras que antes no teníamos bi la menor idea de que dichos sonidos lleguen. Parece que los políticos a nivel nacional nos dejaron en las últimas elecciones una lección extraña, rara de hacer política. Es como si estuviéramos cuna realidad de acuerdo con estas necesidades. De hecho, para la mente política la conciencia colectiva no parecía verdadera; en lugar de campaña debió llamarse “farándula”. Se ha perdido la poca madurez en este sentido.

Todo esto sucedió porque no se dieron cuenta de que tanto la percepción como la experiencia se crean en la mente, especialmente de dirigentes. Por lo tanto, la verdadera estructura del cerebro en sí, donde se encuentra la percepción que depende de las experiencias previas en el mundo. De hecho, para la mente escéptica la conciencia colectiva no parecerá verdadera. Seámos sensatos, la realidad no se puede cambiar con buenas intenciones.

Hay muchas falencias en la vida, de lo que debemos tener mucho cuidado para no tener que lamentar resultados desagradables que dificulten nuestro desarrollo. Lo único verdadero que hoy existe es nuestra propia presencia, ante lo que debemos dar crédito con absoluta verdad.

Estimado lector: haga un análisis de este tema y encontrará la verdad en los resultados electorales que ya terminaron.

Es de esper4ar que casos similares como el que acabamos de pasar y dejó un amargo sabor de boca no se repita jamás en nuestro medio; así haremos valer a nuestra linda tierra digna de mejor suerte.