Ganadores de fútbol sala son premiados con ataúdes, en Perú

PREMIACIÓN. Los ganadores del partido desfilan por la cancha con su premio. Foto: Twitter: @eldesmarque.
PREMIACIÓN. Los ganadores del partido desfilan por la cancha con su premio. Foto: Twitter: @eldesmarque.

Redacción LIMA

AFP

Un insólito torneo de fútbol sala, organizado por empresas funerarias, no tuvo mejor idea que premiar con ataúdes a los tres mejores equipos que participaron en este desopilante campeonato realizado en la región surandina de Puno, frontera de Perú con Bolivia.

La denominada ‘Copa Ataúdes-2019’ se disputó el miércoles entre 12 equipos que representaban a igual número de funerarias en el campo de césped sintético ‘La Bombonera’, en la altiplánica ciudad de Juliaca, a 3.824 metros de altitud.

“Estamos muy orgullosos por haber obtenido el primer lugar. Queremos que el próximo año sea un mejor campeonato”, dijo a la prensa José Luis Olivera, uno de los jugadores de la funeraria Flores, equipo que se alzó con el primer lugar.

Los equipos participantes eligieron nombres alegóricos con la muerte y la actividad laboral que desarrollan.

Los nombres más llamativos fueron ‘Sueño Eterno’, ‘Último adiós’, ‘Descanso y Paz’ ‘Camino al Paraíso’, ‘Los Ángeles’ y ‘Diosito Espérame’. El premio mayor para el equipo ganador fue un ataúd de lujo, valorado en 4.500 mil soles (unos 1.300 dólares).

Los equipos que quedaron en segundo y tercer lugar también recibieron el suyo, aunque de menor cantidad.

“Quiero agradecer a Dios. Jamás a nivel internacional se ha visto un campeonato interfunerarias donde se obsequia ataúdes”, dijo a la prensa uno de los organizadores durante la ceremonia de premiación.

La funeraria Flores se hizo acreedor del primer lugar.

Al grito de “¡Olé, olé, campeón!”, los jugadores ganadores cargaron en hombros el ataúd que recibieron como premio y dieron la vuelta olímpica por el campo de juego.

Los organizadores del singular torneo deportivo indicaron que el próximo año realizarán una competencia donde tendrá que jugarse a muerte para lograr el máximo galardón en disputa.