Las pequeñas Odebrecht

Ángel Polibio Chaves

Una de las circunstancias más penosas que vive el país, es que a diario surgen nuevas noticias sobre los “milagros” de la gigante corruptora brasileña y aunque cada día aparecen más y más implicados que hasta ahora parecería que han logrado impunidad, de ninguna manera podemos permitir que a fuerza de la reiteración de tantos actos de corrupción, pensemos que ya algún día la justicia cumplirá con su deber y sancionará a quienes han causado tanto daño y lleguemos a creer que estas prácticas delictivas no volverán a ocurrir, pues por desgracia, tales prácticas delictuosas no son exclusividad de la banda que mal gobernó el Ecuador bajo la dirección de Correa, sino que ni son nuevas ni han sido cometidas solamente bajo inspiración de Odebrecht.

En efecto, junto a esa gigantesca transnacional, podemos identificar a muchas otras pequeñas y medianas corruptoras que a nivel nacional y local, han venido ejerciendo prácticas similares que no porque importan montos menores, no constituyen una grave lesión para el interés de nuestras comunidades; también en la escala correspondiente, habrá habido alcaldes, ministros, concejales y otras autoridades que por su iniciativa o por la de sus “tentadores”, han incurrido en delitos similares, a tal punto que se llegó a acuñar esa repugnante frase de “roba pero hace obra”, como si fuera normal que quien ejerce una función pública tiene derecho a enriquecerse tomando parte de los recursos que los contribuyentes entregamos para el funcionamiento del Estado y sus instituciones.

Jamás podemos transigir con la corrupción. La “comisión” implica un encarecimiento de las obras, pues cada centavo que se desvía al bolsillo de un mal funcionario, es un centavo menos para la realización de una obra o servicio, es restarle recursos a la educación, a la salud, a obras sanitarias…

¡¡¡Nunca más “odebrechts” grandes o chicas!!!