Recorriendo los cantones

A groso modo es la expresión que cito, porque para recorrer los cantones se requiere hacerlo palmo a palmo necesitando la disponibilidad de tiempo y económico, sin embargo, en un viaje rápido se observa y fundamentalmente se colige que viajar es aprender, innovarse y no embromarse, por tanto, se visita brevemente al desplazarse: la orografía, la hidrografía, el desarrollo comercial, la infraestructura y algo más. En el artículo de opinión anterior dado a conocer en este prestigioso medio de comunicación, cité cantones de nuestro territorio provincial, hoy, nomino a Rioverde ícono de heroicidad que perenniza la gesta histórica por la Independencia de Esmeraldas, símbolo de libertad, cantón ubérrimo que proclama la fecha independentista.

Bañado con encajes de espuma del mar Pacífico y del río Verde que engalana su ribera, marginado por años, pero ahora en manos de nuevos administrativos, que optimistas buscan el ansiado progreso, maravilloso sería el mantenimiento constante de su presencia como cantón, adecentando el balneario y distinguirlo como el símbolo aguerrido de la efeméride provincial. Es prudente decir como complemento de la temática “por ti mi Esmeraldas”, que pronto nuestra tierra será mejor aportando todos con tesón y amor por su crecimiento y desarrollo.

La oportunidad de verla distinguida, limpia y bella está en nuestras manos, aspiro a ver los pocos parques que tenemos, atractivos y llamativos, sugiero respetuosamente contar con el servicio del jardinero que cultiva las plantas de la calle Eloy Alfaro y, además, precisar al ingeniero agrónomo Oswaldo Vivar, para que con su saber y experiencia concrete la arborización de la ciudad, así lo hizo en otra provincia que contó con su amable contingente profesional y quedó admirada y reluciente.

Pude observar la asistencia de limpieza de las alcantarillas en determinado sector de la ciudad, ojalá se replique en todo el entorno ciudadano, hay sectores que apena mucho transitar por él por el hedor que afecta al ambiente y a la salud de los habitantes. Por otra parte, se que el trabajo administrativo es exigente y arduo, no solo de escritorio, hay que palpar la realidad, caminar, desplazarse por sectores para mirar la necesidad y determinar si se cumplen las disposiciones, verbigracia la función del padre de familia quien al regresar al hogar se integra al seno familiar, aguza los sentidos, recomienda, corrige y subsana inconvenientes en aras de la vida armónica. ¡Espero ahora un nuevo amanecer para Esmeraldas, la bella!