Gatos callejeros, guardianes solitarios

VIGILANCIA. No son amigables, pero sí efectivos en el control de los roedores.
VIGILANCIA. No son amigables, pero sí efectivos en el control de los roedores.

Redacción EE.UU.

AFP

Un ejército de guardianes de piel aterciopelada vigila docenas de viviendas y negocios en Washington, prestos a sacar las garras frente a cualquier intruso. ¿Su retribución? Un tazón de leche podría bastar.

Estos sigilosos vigilantes son gatos vagabundos sacados de las calles de la capital de Estados Unidos, y sus presas son la población cada vez más numerosa de ratas y otros roedores.

El programa Blue Collar Cats, inaugurado en 2017 como parte de la iniciativa Humane Rescue Alliance (HRA), que lleva adelante el gobierno de la ciudad, ofrece a estos ‘mininos’, nada acostumbrados a codearse con humanos y que no serían buenas mascotas, como una alternativa ecológica a trampas y productos químicos para luchar contra la plaga.

Vivir bien
Ellos no muestran, en general, interés en socializar, y en su mayoría no dejan que los humanos se les acerquen. Solo están interesados en su instinto de caza.

“A cambio de su efecto disuasorio sobre los roedores, el gato Blue Collar recibe del propietario del local comida, agua y refugio cuando hay mal tiempo”, dice Lauren Lipsey, gerente de HRA, una organización especializada en la protección de los animales.

Cualquier persona que desee adoptar uno de estos guardianes solitarios debe pasar por un estricto proceso de selección con un cuestionario muy específico, para garantizar un ambiente acogedor para el felino.