Preguntas carcelarias

Hay muchas preguntas pero una es la más importante: ¿Cuándo podrá el Estado retomar el control de las cárceles? Porque, por ahora, al parecer, no lo tiene. 290 policías tenían la orden de hacer ayer una requisa en la cárcel de Portoviejo, conocida como El Rodeo. Habían unos 400 presos y ellos, por resistirse a que hurgaran en sus celdas, los atacaron lanzando todo lo que pudieron: piedras, palos, botellas… La única forma de acabar con el relajo fue que unos pocos guías penitenciaros entraran a negociar y dijeran que ya no habría requisa. Y no la hubo, aunque sí hubo 38 policías heridos.

Sabemos que los reos tienen también muchas quejas: sobre la comida y sobre el número de visitas que se les permite, por ejemplo. Pero, ¿cómo es posible que se permita que ellos agredan a los uniformados en pleno Estado de Excepción? Pero, más importante: ¿Qué esconden los presos? ¿Por qué tanto miedo a la requisa?

Podemos decir, por testimonios y análisis de expertos, dos cosas. Primero, que muchos de los reos tienen en sus celdas objetos prohibidos. Segundo, que, lamentablemente, todo se puede hacer y todo tiene un precio en prisión.

En El Rodeo habían 290 policías para 400 presos y no pudieron con ellos. ¿Cómo el Estado, entonces, puede pretender que los guías sí puedan, cuando tienen a su cargo 300 presos por cada uno?

El Estado de Excepción debe servir, no solo para tener a militares fuera de las prisiones, sino para definir con claridad una política carcelaria, para que los reos vivan una verdadera rehabilitación social y no un infierno y un suplicio.


La educación es el arma más poderosa que puedes usar para cambiar el mundo”. Nelson Mandela Político sudafricano (1918-2013)

El que abre la puerta de una escuela, cierra una prisión”. Víctor Hugo Escritor francés (1802-1885)