Por un empleo

Adolfo Coronel Illescas

Utilizando el lóbulo cerebral izquierdo preferido por los matemáticos, me puse a dividir 70 para 8000 cuyo resultado es 0,00875, algo fácil. Lo difícil será para el municipio de Loja, el alcalde Jorge Bailón Abad, dividir 70 vacantes para 8000 postulantes por un empleo y contentar a todos.

Difícil tarea en atención al número de interesados, que han visto en el concurso de méritos y oposición la oportunidad de aspirar a una plaza de trabajo frente a la desesperante, dramática y dolorosa situación de la desocupación, sin trabajo, sin un pan, porque el trabajo es pan, felicidad. Las políticas de ‘el gobierno de todos’ no apoyan la creación de fuentes de trabajo, por el contrario está generando desvinculaciones de trabajadores del Estado, empeorando el problema. Su oferta de crear “no un millón de empleos sino 250 mil por año”, se está quedando en los balcones de Carondelet y en las puertas de la Asamblea Nacional.

Este concurso público por un empleo, ha servido también para darse cuenta de la grave situación laboral, particularmente en la ciudad de Loja, mientras sus autoridades en vez de quedarse en silencio deberían afrontar con ponderación y urgencia, haciendo lo correcto, tal vez lo incorrecto, porque lo peor es no hacer nada. Pero creo que todos debemos hacer conciencia de lo que está pasando y atacar el mal juntos, sector público y privado, inversionistas, cámaras de la producción, universidades, etc. Porque no es posible que cientos de graduados en nuestras universidades no puedan acceder a un empleo y deban aguardar sentados en las banquetas del parque central junto a otros obreros, esperando ser contratados. Ellos se preguntan: ¿De qué sirve entonces el doctorado, masterado, diplomado y más preparación académica?

Hay que esperar que las instituciones y las autoridades, cuando de necesidad laboral se trate, sigan el ejemplo del Alcalde, quién pese a lo complejo del proceso por la demanda y la poca oferta, ha querido transparentarlo, con el afán de apuntalar su plan de acción propuesto, con un equipo humano de gran perfil, limpio de pasado, responsable, honesto, incapaz de tener rabo de paja. Bien por dedicarse a trabajar para darnos trabajo. ¡Y bendito sea el que encuentre su empleo! (O)