Redacción QUITO
El gobernador de la provincia de Azuay, Xavier Martínez, rechazó las acciones de violencia en las inmediaciones de la zona de Río Blanco, ocurridas el sábado pasado. Los responsables son parte de grupos anti mineros que tienen secuestrada la principal carretera a la zona.
El funcionario público anunció investigaciones para dar con los responsables del ataque. Además, dijo que el gobierno tomará “todas las acciones que sean necesarias para la defensa del medio ambiente, del agua, pero la violencia no es la manera de defender nuestro entorno”.
El gobernador condenó la agresión a dos policías que se encontraban patrullando en una vía de la parroquia Molleturo, en Azuay, cerca de donde se encuentra ubicado el proyecto de oro Río Blanco, perteneciente a la empresa Ecuagoldmining.
El ataque al patrullero, que quedó parcialmente destruido, habría sido perpetrado por un grupo de personas que se oponen a la minería y que huyeron en un camión, según lo denunció la ministra del Interior, María Paula Romo.
Por su parte, a través de un comunicado oficial, el ministerio de Energía y Recursos Naturales no Renovables también rechazó los hechos violentos suscitados y expresó su solidaridad con los miembros de la Policía Nacional, “que fueron agredidos mientras estaban en cumplimiento de su deber para mantener la seguridad en la zona”.
Así mismo, el documento determina que desde esa cartera de estado se impulsan todas las acciones legales que permitan en el corto plazo la reapertura del proyecto estratégico a mediana escala Río Blanco. Con el objetivo de “desarrollar una minería legal, con responsabilidad social y ambiental”.
Finalmente, el ministerio ratificó su absoluto rechazo a todas las acciones de violencia e hizo un llamado al diálogo con todos los actores, acorde a los lineamientos del gobierno nacional.
“Trabajamos de manera articulada para combatir la minería ilegal, evitando afectaciones a la seguridad de las personas y el respeto a todos sus derechos”, concluyó el comunicado. (JS)