‘Farmacia natural’ de plantas medicinales se mantiene en Tisaleo

Proceso. Ángel Ainaguano, hijo de la dueña de la granja, también conoce el proceso de secado.
Proceso. Ángel Ainaguano, hijo de la dueña de la granja, también conoce el proceso de secado.
Proceso. Ángel Ainaguano, hijo de la dueña de la granja, también conoce el proceso de secado.
Proceso. Ángel Ainaguano, hijo de la dueña de la granja, también conoce el proceso de secado.
Proceso. Ángel Ainaguano, hijo de la dueña de la granja, también conoce el proceso de secado.
Proceso. Ángel Ainaguano, hijo de la dueña de la granja, también conoce el proceso de secado.
Proceso. Ángel Ainaguano, hijo de la dueña de la granja, también conoce el proceso de secado.
Proceso. Ángel Ainaguano, hijo de la dueña de la granja, también conoce el proceso de secado.

Redacción TUNGURAHUA

Las plantas medicinales recuperan su utilidad con María Yugcha, quien por más de 30 años ha estado a cargo de la granja denominada Vida Nueva, ubicada en el centro de Tisaleo (Tungurahua), a pocos pasos del monumento a las guitarras.

Manzanilla, llantén, ruda, matico, valeriana, entre otras especies de plantas, se cultivan en los predios de María, quien vende sus cultivos en ferias de cantones aledaños. Lo hace a vecinos, familiares y a personas dedicadas a la elaboración de medicamentos naturales de la provincia.

Historia
Según María, hace varios años había más agricultores dedicados a la venta de plantas medicinales en su cantón natal, quienes actualmente han optado por otros cultivos, más rentables para ellos, como la mora y la fresa.

“Yo mantengo mis hierbitas porque con ellas puedo ayudar a bastantes personas con sus dolencias y necesidades”, indicó.

El proceso para sembrar y cosechar las plantas no es sencillo, pues muchas de ellas necesitan cuidados específicos para que puedan desarrollarse en un clima frío como el de Tisaleo.

“Necesitan bastante agua, por eso he tratado de construir un tanque reservorio que me ayuda en los tiempos de estiaje”, aseveró la propietaria de la granja Vida Nueva.

‘Picado’
María no solo vende las plantas en su estado natural, también realiza un proceso para que se las pueda utilizar en infusiones, pastillas, compresas y otros fines curativos.

La dueña de la granja denomina ‘Picado’ al tratamiento que les da a las plantas medicinales, el cual se realiza secando las hojas, el tallo y la raíz, y colocándo sobre plástico para que se sequen en el sol de forma directa o indirecta. Luego, se empaca la materia prima en costales o fundas para que pueda ser trasladada a los lugares donde solicitan el producto.

EL DATO
La granja se ubica cerca del monumento a las guitarras de Tisaleo.Entre los beneficios del secado está la obtención de un producto de buena calidad, las plantas no pierden sus propiedades curativas, el método es económico y el producto se puede conservar hasta un año, explica.

Existen algunos factores que se deben tener en cuenta. Por ejemplo, si se trata de hierbas aromáticas, los cambios climáticos, la lluvia, la humedad y los ayos solares pueden conllevar a que pierdan algunas de sus propiedades.

Cuando la parte de la planta que se desee usar presente un aspecto quebradizo, significa que ya está lista para ser almacenada.

Ángel Ainaguano, hijo de María, mencionó que antes su mamá tenía más cultivos dedicados a la producción de plantas medicinales, pero que debido a las bajas ventas de los últimos años se optó por cambiar de productos.

“A mi mamá siempre le ha gustado sembrar este tipo de plantas, mis hermanas le ayudan también”, indicó Ángel, zapatero de profesión.

La granja Vida Nueva es parte de las rutas turísticas que impulsa la Prefecta de Tungurahua en cada cantón de esa provincia. Aquí se puede realizar paseos guiados por la propietaria del lugar.

Usuarios
Para los vecinos de María Yugcha tener tan cerca gran variedad de plantas medicinales es algo positivo, pues es como tener una farmacia natural en el barrio, aseguran.

Luis Carranza, uno de los moradores del barrio, comentó que conoce de las bondades de la naturaleza y por eso acude siempre a María para comprarle plantas, como la manzanilla para preparar aguas aromáticas, las cuales sirven para aplacar el frío o para aliviar alguna dolencia. (RMC)