En el marco de los diálogos que el Gobierno mantiene con varios sectores (empresariales, sociales y sindicales), ayer en la tarde parecía que le llegaba el turno al Frente Unitario de Trabajadores (FUT).
Aunque representantes del gremio llegaron al Palacio de Carondelet, no fueron recibidos. Esto, ante la amenza de jornadas de movilizaciones para el fin de este mes.
Desde Presidencia fueron enfáticos al señalar que no habrá diálogo con quienes antepongan una medida de hecho. Vía Twitter, el ministro de Economía, Richard Martínez, escribió: “El FUT decide hacer una movilización cuando el país necesita trabajar y hacerlo en paz. Cabe la pregunta si su objetivo real es el diálogo”.
En un inicio, el propósito fue establecer canales de comunicación entre delegados del Gobierno y del FUT para superar la crisis social que vivió durante el paro. “El Gobierno nos llamó previo una agenda que hay. Primero, tiene que suspender el paquete de reformas, que es nuestra propuesta”, manifestó Mesías Tatamuez, presidente del Frente. En la mañana de ayer, los dirigentes del FUT convocaron a una rueda de prensa para expresar su rechazo por haber sido excluidos de la ronda de diálogos, que tiene como mediadores a la ONU y a la Conferencia Episcopal Ecuatoriana.
Ratificaron que a pesar de que el Ejecutivo derogó el Decreto 883 (eliminación de subsidios), todavía había temas por resolver. Además, anunciaron que el sector obrero se movilizará el 30 de octubre.
“Reiteramos la convocatoria a una jornada de movilización nacional en contra del paquetazo neoliberal, en contra de vulnerar los derechos”, agregó José Villavicencio, presidente de la Unión General de Trabajadores del Ecuador (UGTE).
“El Gobierno tiene que aprender a ceder y a conversar con el pueblo. Se trata de mantener un diálogo franco” y claro”, dijo Tatamuez. (DLH)
Las demandas
° Para los grupos que se agrupan en el FUT, uno de los principales puntos es que el Ejecutivo no remita a la Asamblea el anunciado paquete de reformas laborales y se inicie un trabajo en conjunto para elaborar un nuevo Código de Trabajo, y que en ese mismo espacio de concertación se definan las reformas económicas. De igual manera, plantean la reestructuración del Consejo Nacional del Trabajo en la que estén representados las siete centrales sindicales del FUT; que se apliquen las sentencias de la Corte Constitucional relacionadas a la libertad sindical, y se exigen la renuncia de la ministra de Gobierno, María Paula Romo; y de Defensa, Oswaldo Jarrín.
En el marco de los diálogos que el Gobierno mantiene con varios sectores (empresariales, sociales y sindicales), ayer en la tarde parecía que le llegaba el turno al Frente Unitario de Trabajadores (FUT).
Aunque representantes del gremio llegaron al Palacio de Carondelet, no fueron recibidos. Esto, ante la amenza de jornadas de movilizaciones para el fin de este mes.
Desde Presidencia fueron enfáticos al señalar que no habrá diálogo con quienes antepongan una medida de hecho. Vía Twitter, el ministro de Economía, Richard Martínez, escribió: “El FUT decide hacer una movilización cuando el país necesita trabajar y hacerlo en paz. Cabe la pregunta si su objetivo real es el diálogo”.
En un inicio, el propósito fue establecer canales de comunicación entre delegados del Gobierno y del FUT para superar la crisis social que vivió durante el paro. “El Gobierno nos llamó previo una agenda que hay. Primero, tiene que suspender el paquete de reformas, que es nuestra propuesta”, manifestó Mesías Tatamuez, presidente del Frente. En la mañana de ayer, los dirigentes del FUT convocaron a una rueda de prensa para expresar su rechazo por haber sido excluidos de la ronda de diálogos, que tiene como mediadores a la ONU y a la Conferencia Episcopal Ecuatoriana.
Ratificaron que a pesar de que el Ejecutivo derogó el Decreto 883 (eliminación de subsidios), todavía había temas por resolver. Además, anunciaron que el sector obrero se movilizará el 30 de octubre.
“Reiteramos la convocatoria a una jornada de movilización nacional en contra del paquetazo neoliberal, en contra de vulnerar los derechos”, agregó José Villavicencio, presidente de la Unión General de Trabajadores del Ecuador (UGTE).
“El Gobierno tiene que aprender a ceder y a conversar con el pueblo. Se trata de mantener un diálogo franco” y claro”, dijo Tatamuez. (DLH)
Las demandas
° Para los grupos que se agrupan en el FUT, uno de los principales puntos es que el Ejecutivo no remita a la Asamblea el anunciado paquete de reformas laborales y se inicie un trabajo en conjunto para elaborar un nuevo Código de Trabajo, y que en ese mismo espacio de concertación se definan las reformas económicas. De igual manera, plantean la reestructuración del Consejo Nacional del Trabajo en la que estén representados las siete centrales sindicales del FUT; que se apliquen las sentencias de la Corte Constitucional relacionadas a la libertad sindical, y se exigen la renuncia de la ministra de Gobierno, María Paula Romo; y de Defensa, Oswaldo Jarrín.
En el marco de los diálogos que el Gobierno mantiene con varios sectores (empresariales, sociales y sindicales), ayer en la tarde parecía que le llegaba el turno al Frente Unitario de Trabajadores (FUT).
Aunque representantes del gremio llegaron al Palacio de Carondelet, no fueron recibidos. Esto, ante la amenza de jornadas de movilizaciones para el fin de este mes.
Desde Presidencia fueron enfáticos al señalar que no habrá diálogo con quienes antepongan una medida de hecho. Vía Twitter, el ministro de Economía, Richard Martínez, escribió: “El FUT decide hacer una movilización cuando el país necesita trabajar y hacerlo en paz. Cabe la pregunta si su objetivo real es el diálogo”.
En un inicio, el propósito fue establecer canales de comunicación entre delegados del Gobierno y del FUT para superar la crisis social que vivió durante el paro. “El Gobierno nos llamó previo una agenda que hay. Primero, tiene que suspender el paquete de reformas, que es nuestra propuesta”, manifestó Mesías Tatamuez, presidente del Frente. En la mañana de ayer, los dirigentes del FUT convocaron a una rueda de prensa para expresar su rechazo por haber sido excluidos de la ronda de diálogos, que tiene como mediadores a la ONU y a la Conferencia Episcopal Ecuatoriana.
Ratificaron que a pesar de que el Ejecutivo derogó el Decreto 883 (eliminación de subsidios), todavía había temas por resolver. Además, anunciaron que el sector obrero se movilizará el 30 de octubre.
“Reiteramos la convocatoria a una jornada de movilización nacional en contra del paquetazo neoliberal, en contra de vulnerar los derechos”, agregó José Villavicencio, presidente de la Unión General de Trabajadores del Ecuador (UGTE).
“El Gobierno tiene que aprender a ceder y a conversar con el pueblo. Se trata de mantener un diálogo franco” y claro”, dijo Tatamuez. (DLH)
Las demandas
° Para los grupos que se agrupan en el FUT, uno de los principales puntos es que el Ejecutivo no remita a la Asamblea el anunciado paquete de reformas laborales y se inicie un trabajo en conjunto para elaborar un nuevo Código de Trabajo, y que en ese mismo espacio de concertación se definan las reformas económicas. De igual manera, plantean la reestructuración del Consejo Nacional del Trabajo en la que estén representados las siete centrales sindicales del FUT; que se apliquen las sentencias de la Corte Constitucional relacionadas a la libertad sindical, y se exigen la renuncia de la ministra de Gobierno, María Paula Romo; y de Defensa, Oswaldo Jarrín.
En el marco de los diálogos que el Gobierno mantiene con varios sectores (empresariales, sociales y sindicales), ayer en la tarde parecía que le llegaba el turno al Frente Unitario de Trabajadores (FUT).
Aunque representantes del gremio llegaron al Palacio de Carondelet, no fueron recibidos. Esto, ante la amenza de jornadas de movilizaciones para el fin de este mes.
Desde Presidencia fueron enfáticos al señalar que no habrá diálogo con quienes antepongan una medida de hecho. Vía Twitter, el ministro de Economía, Richard Martínez, escribió: “El FUT decide hacer una movilización cuando el país necesita trabajar y hacerlo en paz. Cabe la pregunta si su objetivo real es el diálogo”.
En un inicio, el propósito fue establecer canales de comunicación entre delegados del Gobierno y del FUT para superar la crisis social que vivió durante el paro. “El Gobierno nos llamó previo una agenda que hay. Primero, tiene que suspender el paquete de reformas, que es nuestra propuesta”, manifestó Mesías Tatamuez, presidente del Frente. En la mañana de ayer, los dirigentes del FUT convocaron a una rueda de prensa para expresar su rechazo por haber sido excluidos de la ronda de diálogos, que tiene como mediadores a la ONU y a la Conferencia Episcopal Ecuatoriana.
Ratificaron que a pesar de que el Ejecutivo derogó el Decreto 883 (eliminación de subsidios), todavía había temas por resolver. Además, anunciaron que el sector obrero se movilizará el 30 de octubre.
“Reiteramos la convocatoria a una jornada de movilización nacional en contra del paquetazo neoliberal, en contra de vulnerar los derechos”, agregó José Villavicencio, presidente de la Unión General de Trabajadores del Ecuador (UGTE).
“El Gobierno tiene que aprender a ceder y a conversar con el pueblo. Se trata de mantener un diálogo franco” y claro”, dijo Tatamuez. (DLH)
Las demandas
° Para los grupos que se agrupan en el FUT, uno de los principales puntos es que el Ejecutivo no remita a la Asamblea el anunciado paquete de reformas laborales y se inicie un trabajo en conjunto para elaborar un nuevo Código de Trabajo, y que en ese mismo espacio de concertación se definan las reformas económicas. De igual manera, plantean la reestructuración del Consejo Nacional del Trabajo en la que estén representados las siete centrales sindicales del FUT; que se apliquen las sentencias de la Corte Constitucional relacionadas a la libertad sindical, y se exigen la renuncia de la ministra de Gobierno, María Paula Romo; y de Defensa, Oswaldo Jarrín.