Orden, equilibrio y conocimiento

POR: Rocío Erazo Benavides

La base social está compuesta por conductas determinantes como: actitud, desarrollo social y desarrollo económico. En la actualidad, después de 11 días en Ecuador de una paralización, de una crisis, ahora se ve que afecta en Latinoamérica. La carencia de valores morales a llevado a que los grupos sociales carezcan de orden, equilibrio y conocimiento, y a esto se vincula el marco social, político, cultural y económico.

Estas fuerzas de carencia se enfrentan entre sociedades de los mismos núcleos, creyendo que los que nos defienden con autoridad del gobierno, que son la fuerza pública, cuidan el orden; y, los otros, los que defienden el dominio del gobierno.

La ausencia de estos tres factores ha hecho que se desborde el control de los grupos sociales en las dirigencias sindicales, indígenas, laborales, políticas, que deben direccionar a que los reclamos tengan un horizonte.

El llamado no solo es al diálogo de paz, a la construcción de nuevos decretos o medidas económicas, sino a que los dirigentes direccionen su discurso a los momentos actuales y con realidad que vive el Ecuador, considerando que hay falencias de regímenes anteriores que han manoseado primero a la democracia y a la par la economía, y que fue un detonante de reclamo social el pasado 12 de octubre, se marcó un antes y un después, fueron 11 días de paralización, de resistencia y seguro de reflexión social no solo para el gobierno, o el sector indígena, sino para toda la población ecuatoriana que debe dimensionar el problema de todo un país y la dirección que debe tomarse.

No solo las corrientes de desestabilización de los sistemas políticos del continente que como asegura la OEA tiene su origen en la estrategia de las dictaduras venezolana y cubana con malas prácticas que esencialmente financia, apoya y promueve el conflicto político y social, funcionaron como en el pasado, “se ha institucionalizado en la región sofisticadas estructuras”. La corresponsabilidad es de todos los actores.

POR: Rocío Erazo Benavides

La base social está compuesta por conductas determinantes como: actitud, desarrollo social y desarrollo económico. En la actualidad, después de 11 días en Ecuador de una paralización, de una crisis, ahora se ve que afecta en Latinoamérica. La carencia de valores morales a llevado a que los grupos sociales carezcan de orden, equilibrio y conocimiento, y a esto se vincula el marco social, político, cultural y económico.

Estas fuerzas de carencia se enfrentan entre sociedades de los mismos núcleos, creyendo que los que nos defienden con autoridad del gobierno, que son la fuerza pública, cuidan el orden; y, los otros, los que defienden el dominio del gobierno.

La ausencia de estos tres factores ha hecho que se desborde el control de los grupos sociales en las dirigencias sindicales, indígenas, laborales, políticas, que deben direccionar a que los reclamos tengan un horizonte.

El llamado no solo es al diálogo de paz, a la construcción de nuevos decretos o medidas económicas, sino a que los dirigentes direccionen su discurso a los momentos actuales y con realidad que vive el Ecuador, considerando que hay falencias de regímenes anteriores que han manoseado primero a la democracia y a la par la economía, y que fue un detonante de reclamo social el pasado 12 de octubre, se marcó un antes y un después, fueron 11 días de paralización, de resistencia y seguro de reflexión social no solo para el gobierno, o el sector indígena, sino para toda la población ecuatoriana que debe dimensionar el problema de todo un país y la dirección que debe tomarse.

No solo las corrientes de desestabilización de los sistemas políticos del continente que como asegura la OEA tiene su origen en la estrategia de las dictaduras venezolana y cubana con malas prácticas que esencialmente financia, apoya y promueve el conflicto político y social, funcionaron como en el pasado, “se ha institucionalizado en la región sofisticadas estructuras”. La corresponsabilidad es de todos los actores.

POR: Rocío Erazo Benavides

La base social está compuesta por conductas determinantes como: actitud, desarrollo social y desarrollo económico. En la actualidad, después de 11 días en Ecuador de una paralización, de una crisis, ahora se ve que afecta en Latinoamérica. La carencia de valores morales a llevado a que los grupos sociales carezcan de orden, equilibrio y conocimiento, y a esto se vincula el marco social, político, cultural y económico.

Estas fuerzas de carencia se enfrentan entre sociedades de los mismos núcleos, creyendo que los que nos defienden con autoridad del gobierno, que son la fuerza pública, cuidan el orden; y, los otros, los que defienden el dominio del gobierno.

La ausencia de estos tres factores ha hecho que se desborde el control de los grupos sociales en las dirigencias sindicales, indígenas, laborales, políticas, que deben direccionar a que los reclamos tengan un horizonte.

El llamado no solo es al diálogo de paz, a la construcción de nuevos decretos o medidas económicas, sino a que los dirigentes direccionen su discurso a los momentos actuales y con realidad que vive el Ecuador, considerando que hay falencias de regímenes anteriores que han manoseado primero a la democracia y a la par la economía, y que fue un detonante de reclamo social el pasado 12 de octubre, se marcó un antes y un después, fueron 11 días de paralización, de resistencia y seguro de reflexión social no solo para el gobierno, o el sector indígena, sino para toda la población ecuatoriana que debe dimensionar el problema de todo un país y la dirección que debe tomarse.

No solo las corrientes de desestabilización de los sistemas políticos del continente que como asegura la OEA tiene su origen en la estrategia de las dictaduras venezolana y cubana con malas prácticas que esencialmente financia, apoya y promueve el conflicto político y social, funcionaron como en el pasado, “se ha institucionalizado en la región sofisticadas estructuras”. La corresponsabilidad es de todos los actores.

POR: Rocío Erazo Benavides

La base social está compuesta por conductas determinantes como: actitud, desarrollo social y desarrollo económico. En la actualidad, después de 11 días en Ecuador de una paralización, de una crisis, ahora se ve que afecta en Latinoamérica. La carencia de valores morales a llevado a que los grupos sociales carezcan de orden, equilibrio y conocimiento, y a esto se vincula el marco social, político, cultural y económico.

Estas fuerzas de carencia se enfrentan entre sociedades de los mismos núcleos, creyendo que los que nos defienden con autoridad del gobierno, que son la fuerza pública, cuidan el orden; y, los otros, los que defienden el dominio del gobierno.

La ausencia de estos tres factores ha hecho que se desborde el control de los grupos sociales en las dirigencias sindicales, indígenas, laborales, políticas, que deben direccionar a que los reclamos tengan un horizonte.

El llamado no solo es al diálogo de paz, a la construcción de nuevos decretos o medidas económicas, sino a que los dirigentes direccionen su discurso a los momentos actuales y con realidad que vive el Ecuador, considerando que hay falencias de regímenes anteriores que han manoseado primero a la democracia y a la par la economía, y que fue un detonante de reclamo social el pasado 12 de octubre, se marcó un antes y un después, fueron 11 días de paralización, de resistencia y seguro de reflexión social no solo para el gobierno, o el sector indígena, sino para toda la población ecuatoriana que debe dimensionar el problema de todo un país y la dirección que debe tomarse.

No solo las corrientes de desestabilización de los sistemas políticos del continente que como asegura la OEA tiene su origen en la estrategia de las dictaduras venezolana y cubana con malas prácticas que esencialmente financia, apoya y promueve el conflicto político y social, funcionaron como en el pasado, “se ha institucionalizado en la región sofisticadas estructuras”. La corresponsabilidad es de todos los actores.