Los difuntos tsáchilas reciben comida y protección

Tradición. Para el Día de los Muertos, los tsáchilas van a visitar a sus familiares en los camposantos. (Foto: Archivo La Hora)
Tradición. Para el Día de los Muertos, los tsáchilas van a visitar a sus familiares en los camposantos. (Foto: Archivo La Hora)
Tradición. Para el Día de los Muertos, los tsáchilas van a visitar a sus familiares en los camposantos. (Foto: Archivo La Hora)
Tradición. Para el Día de los Muertos, los tsáchilas van a visitar a sus familiares en los camposantos. (Foto: Archivo La Hora)
Tradición. Para el Día de los Muertos, los tsáchilas van a visitar a sus familiares en los camposantos. (Foto: Archivo La Hora)
Tradición. Para el Día de los Muertos, los tsáchilas van a visitar a sus familiares en los camposantos. (Foto: Archivo La Hora)
Tradición. Para el Día de los Muertos, los tsáchilas van a visitar a sus familiares en los camposantos. (Foto: Archivo La Hora)
Tradición. Para el Día de los Muertos, los tsáchilas van a visitar a sus familiares en los camposantos. (Foto: Archivo La Hora)

Redacción SANTO DOMINGO DE LOS TSÁCHILAS, LA HORA

Los muertos necesitan protegerse del sol y la lluvia, tal como los vivos. Así lo demuestran las cubiertas que se construyen sobre las tumbas de los tsáchilas.

En el cementerio de la comuna San Miguel de los Colorados, vía hacia Puerto Limón, una parroquia rural de Santo Domingo, es fácil diferenciar entre las tumbas de los mestizos y las de la nacionalidad. Las de los últimos están dentro de chozas, hechas por sus familiares. Unos indican que es para resguardarlos de las inclemencias del tiempo y otros que se lo hace porque cuando los espíritus vienen (para el Día de Difuntos), quieren sentirse como en casa y pasar con su familia.

Antecedentes
Este camposanto, según la historia, fue el primero para los habitantes tsáchilas, porque la comuna era el punto de encuentro de los nativos que llegaban desde sus territorios. Sin embargo, hace varios años se han hecho cementerios en cada comunidad y se han llevado algunos difuntos. Los que aún permanecen son, en su mayoría, de Peripa, por la cercanía, pero están mezclados con muertos mestizos.

Lola Calazacón, habitante de Chigüilpe, dijo que por la lejanía de San Miguel, hace 22 años decidió hacer el cementerio en Chigüilpe, para llevar a sus antepasados al lugar. Construir las chozas sobre las tumbas es una de las creencias que no se ha perdido.

Redacción SANTO DOMINGO DE LOS TSÁCHILAS, LA HORA

Los muertos necesitan protegerse del sol y la lluvia, tal como los vivos. Así lo demuestran las cubiertas que se construyen sobre las tumbas de los tsáchilas.

En el cementerio de la comuna San Miguel de los Colorados, vía hacia Puerto Limón, una parroquia rural de Santo Domingo, es fácil diferenciar entre las tumbas de los mestizos y las de la nacionalidad. Las de los últimos están dentro de chozas, hechas por sus familiares. Unos indican que es para resguardarlos de las inclemencias del tiempo y otros que se lo hace porque cuando los espíritus vienen (para el Día de Difuntos), quieren sentirse como en casa y pasar con su familia.

Antecedentes
Este camposanto, según la historia, fue el primero para los habitantes tsáchilas, porque la comuna era el punto de encuentro de los nativos que llegaban desde sus territorios. Sin embargo, hace varios años se han hecho cementerios en cada comunidad y se han llevado algunos difuntos. Los que aún permanecen son, en su mayoría, de Peripa, por la cercanía, pero están mezclados con muertos mestizos.

Lola Calazacón, habitante de Chigüilpe, dijo que por la lejanía de San Miguel, hace 22 años decidió hacer el cementerio en Chigüilpe, para llevar a sus antepasados al lugar. Construir las chozas sobre las tumbas es una de las creencias que no se ha perdido.

Redacción SANTO DOMINGO DE LOS TSÁCHILAS, LA HORA

Los muertos necesitan protegerse del sol y la lluvia, tal como los vivos. Así lo demuestran las cubiertas que se construyen sobre las tumbas de los tsáchilas.

En el cementerio de la comuna San Miguel de los Colorados, vía hacia Puerto Limón, una parroquia rural de Santo Domingo, es fácil diferenciar entre las tumbas de los mestizos y las de la nacionalidad. Las de los últimos están dentro de chozas, hechas por sus familiares. Unos indican que es para resguardarlos de las inclemencias del tiempo y otros que se lo hace porque cuando los espíritus vienen (para el Día de Difuntos), quieren sentirse como en casa y pasar con su familia.

Antecedentes
Este camposanto, según la historia, fue el primero para los habitantes tsáchilas, porque la comuna era el punto de encuentro de los nativos que llegaban desde sus territorios. Sin embargo, hace varios años se han hecho cementerios en cada comunidad y se han llevado algunos difuntos. Los que aún permanecen son, en su mayoría, de Peripa, por la cercanía, pero están mezclados con muertos mestizos.

Lola Calazacón, habitante de Chigüilpe, dijo que por la lejanía de San Miguel, hace 22 años decidió hacer el cementerio en Chigüilpe, para llevar a sus antepasados al lugar. Construir las chozas sobre las tumbas es una de las creencias que no se ha perdido.

Arreglos. Los familiares van a arreglar las tumbas. (Foto: Archivo La Hora)
Arreglos. Los familiares van a arreglar las tumbas. (Foto: Archivo La Hora)
Arreglos. Los familiares van a arreglar las tumbas. (Foto: Archivo La Hora)
Arreglos. Los familiares van a arreglar las tumbas. (Foto: Archivo La Hora)
Arreglos. Los familiares van a arreglar las tumbas. (Foto: Archivo La Hora)
Arreglos. Los familiares van a arreglar las tumbas. (Foto: Archivo La Hora)
Arreglos. Los familiares van a arreglar las tumbas. (Foto: Archivo La Hora)
Arreglos. Los familiares van a arreglar las tumbas. (Foto: Archivo La Hora)

Redacción SANTO DOMINGO DE LOS TSÁCHILAS, LA HORA

Los muertos necesitan protegerse del sol y la lluvia, tal como los vivos. Así lo demuestran las cubiertas que se construyen sobre las tumbas de los tsáchilas.

En el cementerio de la comuna San Miguel de los Colorados, vía hacia Puerto Limón, una parroquia rural de Santo Domingo, es fácil diferenciar entre las tumbas de los mestizos y las de la nacionalidad. Las de los últimos están dentro de chozas, hechas por sus familiares. Unos indican que es para resguardarlos de las inclemencias del tiempo y otros que se lo hace porque cuando los espíritus vienen (para el Día de Difuntos), quieren sentirse como en casa y pasar con su familia.

Antecedentes
Este camposanto, según la historia, fue el primero para los habitantes tsáchilas, porque la comuna era el punto de encuentro de los nativos que llegaban desde sus territorios. Sin embargo, hace varios años se han hecho cementerios en cada comunidad y se han llevado algunos difuntos. Los que aún permanecen son, en su mayoría, de Peripa, por la cercanía, pero están mezclados con muertos mestizos.

Lola Calazacón, habitante de Chigüilpe, dijo que por la lejanía de San Miguel, hace 22 años decidió hacer el cementerio en Chigüilpe, para llevar a sus antepasados al lugar. Construir las chozas sobre las tumbas es una de las creencias que no se ha perdido.

Los alimentos
Otra de las costumbres, aunque ya no se practique al 100%, es llevar comida a los muertos, lo que más les gustaba, por lo general guanta, guatuso o ayampaco. Algunos comparten entre todos, incluyendo al finado, y otros le llevan la comida y la dejan para que él decida cuándo degustarla. Si le gustaba algún licor en especial, también lo entregan.

A veces prefieren hacer limpias cuando se van y regresan del cementerio, especialmente a los niños, para que no les dé ‘mal aire’. Piensan que la tierra del camposanto viene con malas vibras, por esto antes de entrar a sus hogares se limpian los zapatos y se bañan para evitar llevarlas a sus viviendas. (DLH)

Se van al Pi´pua
° Cuando un tsáchila muere, la creencia es que se va al Pi´pua (horizonte), lo que sería como el cielo para los mestizos. En ese sitio, la persona se encontaría con sus amigos y conocidos y todo sería alegría, estaría como en una fiesta, por eso debe ir bien vestido. En el caso de las mujeres con su tunán (falda típica), panu (blusa que cubre los pechos), centa (cintas coloridas para la cabellera) y wim (collares y pulseras). Los hombres deben tener su mu (peinado típico con achiote), mishili (corona de algodón) manpe tsampa (falda tsáchila) y sendori (faja roja). Todos deben ir con su mali shili (las rayas pintadas en cuerpo). Asimismo, se coloca en el ataúd dos paradas más de ropa que utilizaba el finado.

Los alimentos
Otra de las costumbres, aunque ya no se practique al 100%, es llevar comida a los muertos, lo que más les gustaba, por lo general guanta, guatuso o ayampaco. Algunos comparten entre todos, incluyendo al finado, y otros le llevan la comida y la dejan para que él decida cuándo degustarla. Si le gustaba algún licor en especial, también lo entregan.

A veces prefieren hacer limpias cuando se van y regresan del cementerio, especialmente a los niños, para que no les dé ‘mal aire’. Piensan que la tierra del camposanto viene con malas vibras, por esto antes de entrar a sus hogares se limpian los zapatos y se bañan para evitar llevarlas a sus viviendas. (DLH)

Se van al Pi´pua
° Cuando un tsáchila muere, la creencia es que se va al Pi´pua (horizonte), lo que sería como el cielo para los mestizos. En ese sitio, la persona se encontaría con sus amigos y conocidos y todo sería alegría, estaría como en una fiesta, por eso debe ir bien vestido. En el caso de las mujeres con su tunán (falda típica), panu (blusa que cubre los pechos), centa (cintas coloridas para la cabellera) y wim (collares y pulseras). Los hombres deben tener su mu (peinado típico con achiote), mishili (corona de algodón) manpe tsampa (falda tsáchila) y sendori (faja roja). Todos deben ir con su mali shili (las rayas pintadas en cuerpo). Asimismo, se coloca en el ataúd dos paradas más de ropa que utilizaba el finado.

Los alimentos
Otra de las costumbres, aunque ya no se practique al 100%, es llevar comida a los muertos, lo que más les gustaba, por lo general guanta, guatuso o ayampaco. Algunos comparten entre todos, incluyendo al finado, y otros le llevan la comida y la dejan para que él decida cuándo degustarla. Si le gustaba algún licor en especial, también lo entregan.

A veces prefieren hacer limpias cuando se van y regresan del cementerio, especialmente a los niños, para que no les dé ‘mal aire’. Piensan que la tierra del camposanto viene con malas vibras, por esto antes de entrar a sus hogares se limpian los zapatos y se bañan para evitar llevarlas a sus viviendas. (DLH)

Se van al Pi´pua
° Cuando un tsáchila muere, la creencia es que se va al Pi´pua (horizonte), lo que sería como el cielo para los mestizos. En ese sitio, la persona se encontaría con sus amigos y conocidos y todo sería alegría, estaría como en una fiesta, por eso debe ir bien vestido. En el caso de las mujeres con su tunán (falda típica), panu (blusa que cubre los pechos), centa (cintas coloridas para la cabellera) y wim (collares y pulseras). Los hombres deben tener su mu (peinado típico con achiote), mishili (corona de algodón) manpe tsampa (falda tsáchila) y sendori (faja roja). Todos deben ir con su mali shili (las rayas pintadas en cuerpo). Asimismo, se coloca en el ataúd dos paradas más de ropa que utilizaba el finado.

Los alimentos
Otra de las costumbres, aunque ya no se practique al 100%, es llevar comida a los muertos, lo que más les gustaba, por lo general guanta, guatuso o ayampaco. Algunos comparten entre todos, incluyendo al finado, y otros le llevan la comida y la dejan para que él decida cuándo degustarla. Si le gustaba algún licor en especial, también lo entregan.

A veces prefieren hacer limpias cuando se van y regresan del cementerio, especialmente a los niños, para que no les dé ‘mal aire’. Piensan que la tierra del camposanto viene con malas vibras, por esto antes de entrar a sus hogares se limpian los zapatos y se bañan para evitar llevarlas a sus viviendas. (DLH)

Se van al Pi´pua
° Cuando un tsáchila muere, la creencia es que se va al Pi´pua (horizonte), lo que sería como el cielo para los mestizos. En ese sitio, la persona se encontaría con sus amigos y conocidos y todo sería alegría, estaría como en una fiesta, por eso debe ir bien vestido. En el caso de las mujeres con su tunán (falda típica), panu (blusa que cubre los pechos), centa (cintas coloridas para la cabellera) y wim (collares y pulseras). Los hombres deben tener su mu (peinado típico con achiote), mishili (corona de algodón) manpe tsampa (falda tsáchila) y sendori (faja roja). Todos deben ir con su mali shili (las rayas pintadas en cuerpo). Asimismo, se coloca en el ataúd dos paradas más de ropa que utilizaba el finado.

Historia. En San Miguel reposa Abraham Calazacón. (Foto: Archivo La Hora)
Historia. En San Miguel reposa Abraham Calazacón. (Foto: Archivo La Hora)
Historia. En San Miguel reposa Abraham Calazacón. (Foto: Archivo La Hora)
Historia. En San Miguel reposa Abraham Calazacón. (Foto: Archivo La Hora)
Historia. En San Miguel reposa Abraham Calazacón. (Foto: Archivo La Hora)
Historia. En San Miguel reposa Abraham Calazacón. (Foto: Archivo La Hora)
Historia. En San Miguel reposa Abraham Calazacón. (Foto: Archivo La Hora)
Historia. En San Miguel reposa Abraham Calazacón. (Foto: Archivo La Hora)

Chicha de yuca
° La colada morada es tradicional para los mestizos en estos días, y los tsáchilas no se quedan atrás con sus preparaciones típicas. Ellos consumen chicha de yuca, que es un brebaje especial para estas fechas, para compartir.

El sepulcro de Abraham Calazacón
° En el cementerio de la comuna San Miguel de los Colorados está enterrado Abraham Calazacón, reconocido poné (shamán), gobernador vitalicio y máximo referente de la nacionalidad en Santo Domingo, Ecuador y el mundo.

Chicha de yuca
° La colada morada es tradicional para los mestizos en estos días, y los tsáchilas no se quedan atrás con sus preparaciones típicas. Ellos consumen chicha de yuca, que es un brebaje especial para estas fechas, para compartir.

El sepulcro de Abraham Calazacón
° En el cementerio de la comuna San Miguel de los Colorados está enterrado Abraham Calazacón, reconocido poné (shamán), gobernador vitalicio y máximo referente de la nacionalidad en Santo Domingo, Ecuador y el mundo.

Chicha de yuca
° La colada morada es tradicional para los mestizos en estos días, y los tsáchilas no se quedan atrás con sus preparaciones típicas. Ellos consumen chicha de yuca, que es un brebaje especial para estas fechas, para compartir.

El sepulcro de Abraham Calazacón
° En el cementerio de la comuna San Miguel de los Colorados está enterrado Abraham Calazacón, reconocido poné (shamán), gobernador vitalicio y máximo referente de la nacionalidad en Santo Domingo, Ecuador y el mundo.

Chicha de yuca
° La colada morada es tradicional para los mestizos en estos días, y los tsáchilas no se quedan atrás con sus preparaciones típicas. Ellos consumen chicha de yuca, que es un brebaje especial para estas fechas, para compartir.

El sepulcro de Abraham Calazacón
° En el cementerio de la comuna San Miguel de los Colorados está enterrado Abraham Calazacón, reconocido poné (shamán), gobernador vitalicio y máximo referente de la nacionalidad en Santo Domingo, Ecuador y el mundo.