La economía Popular y Solidaria, que comprende el movimiento generado alrededor de cooperativas, banca comunal y cajas de ahorro, representa el 14,2% del Producto Interno Bruto (PIB). El 80% de los créditos otorgados en el sector va a personas de entre 30 y 65 años.
Margarita Hernández, superintendente de Economía Popular y Solidaria, explicó que los beneficiarios del financiamiento cooperativo y comunal se encuentran en todos los estratos sociales, pero sobre todo en los de más bajos ingresos, y que encuentran en el emprendimiento y el autoempleo una forma de superarse.
El 24% de los créditos del sector va a ecuatorianos entre 50 y 65 años. “Este segmento es uno de los más vulnerables porque ya no puede encontrar ningún tipo de trabajo, y en más del 70% de los casos no tiene seguro, público o privado”, comentó Alberto Miranda, economista y experto en cooperativismo.
Asimismo, hasta el 40% del financiamiento beneficia a jóvenes entre 18 y 29 años, que son otro de los grupos más golpeados por el desempleo y la informalidad. Finalmente, entre el 25% y 31% de los préstamos beneficia a personas entre 30 y 38 años. Estas cifras se mantienen desde 2012.
“El usuario de cooperativas, banca comunal y cajas de ahorro, en el 76% de los casos, tiene como máximo hasta instrucción secundaria; y una edad promedio entre los 30 y 39 años”, puntualizó Hernández. El ingreso mensual de los usuarios es de 1.827 dólares para hombres y 1.693 para mujeres.
Evolución sostenida
14,2%
del PIB representa la economía popular y solidaria. Los activos en la Economía Popular y Solidaria han crecido 132% desde 2012, hasta llegar a los 14.000 millones. Actualmente, existen 3.333 puntos de atención, entre oficinas matrices y sucursales, en todo el país. De ese total, 1.099 está ubicadas en zonas donde el rango de pobreza supera el 50%; 674 puntos está en territorios donde la pobreza supera el 75%.
Otra característica del sector es que se coloca créditos más de lo que se captan depósitos. En otras palabras, por cada dólar captado, se entrega financiamiento por un dólar 68 centavos. (JS)
La economía Popular y Solidaria, que comprende el movimiento generado alrededor de cooperativas, banca comunal y cajas de ahorro, representa el 14,2% del Producto Interno Bruto (PIB). El 80% de los créditos otorgados en el sector va a personas de entre 30 y 65 años.
Margarita Hernández, superintendente de Economía Popular y Solidaria, explicó que los beneficiarios del financiamiento cooperativo y comunal se encuentran en todos los estratos sociales, pero sobre todo en los de más bajos ingresos, y que encuentran en el emprendimiento y el autoempleo una forma de superarse.
El 24% de los créditos del sector va a ecuatorianos entre 50 y 65 años. “Este segmento es uno de los más vulnerables porque ya no puede encontrar ningún tipo de trabajo, y en más del 70% de los casos no tiene seguro, público o privado”, comentó Alberto Miranda, economista y experto en cooperativismo.
Asimismo, hasta el 40% del financiamiento beneficia a jóvenes entre 18 y 29 años, que son otro de los grupos más golpeados por el desempleo y la informalidad. Finalmente, entre el 25% y 31% de los préstamos beneficia a personas entre 30 y 38 años. Estas cifras se mantienen desde 2012.
“El usuario de cooperativas, banca comunal y cajas de ahorro, en el 76% de los casos, tiene como máximo hasta instrucción secundaria; y una edad promedio entre los 30 y 39 años”, puntualizó Hernández. El ingreso mensual de los usuarios es de 1.827 dólares para hombres y 1.693 para mujeres.
Evolución sostenida
14,2%
del PIB representa la economía popular y solidaria. Los activos en la Economía Popular y Solidaria han crecido 132% desde 2012, hasta llegar a los 14.000 millones. Actualmente, existen 3.333 puntos de atención, entre oficinas matrices y sucursales, en todo el país. De ese total, 1.099 está ubicadas en zonas donde el rango de pobreza supera el 50%; 674 puntos está en territorios donde la pobreza supera el 75%.
Otra característica del sector es que se coloca créditos más de lo que se captan depósitos. En otras palabras, por cada dólar captado, se entrega financiamiento por un dólar 68 centavos. (JS)
La economía Popular y Solidaria, que comprende el movimiento generado alrededor de cooperativas, banca comunal y cajas de ahorro, representa el 14,2% del Producto Interno Bruto (PIB). El 80% de los créditos otorgados en el sector va a personas de entre 30 y 65 años.
Margarita Hernández, superintendente de Economía Popular y Solidaria, explicó que los beneficiarios del financiamiento cooperativo y comunal se encuentran en todos los estratos sociales, pero sobre todo en los de más bajos ingresos, y que encuentran en el emprendimiento y el autoempleo una forma de superarse.
El 24% de los créditos del sector va a ecuatorianos entre 50 y 65 años. “Este segmento es uno de los más vulnerables porque ya no puede encontrar ningún tipo de trabajo, y en más del 70% de los casos no tiene seguro, público o privado”, comentó Alberto Miranda, economista y experto en cooperativismo.
Asimismo, hasta el 40% del financiamiento beneficia a jóvenes entre 18 y 29 años, que son otro de los grupos más golpeados por el desempleo y la informalidad. Finalmente, entre el 25% y 31% de los préstamos beneficia a personas entre 30 y 38 años. Estas cifras se mantienen desde 2012.
“El usuario de cooperativas, banca comunal y cajas de ahorro, en el 76% de los casos, tiene como máximo hasta instrucción secundaria; y una edad promedio entre los 30 y 39 años”, puntualizó Hernández. El ingreso mensual de los usuarios es de 1.827 dólares para hombres y 1.693 para mujeres.
Evolución sostenida
14,2%
del PIB representa la economía popular y solidaria. Los activos en la Economía Popular y Solidaria han crecido 132% desde 2012, hasta llegar a los 14.000 millones. Actualmente, existen 3.333 puntos de atención, entre oficinas matrices y sucursales, en todo el país. De ese total, 1.099 está ubicadas en zonas donde el rango de pobreza supera el 50%; 674 puntos está en territorios donde la pobreza supera el 75%.
Otra característica del sector es que se coloca créditos más de lo que se captan depósitos. En otras palabras, por cada dólar captado, se entrega financiamiento por un dólar 68 centavos. (JS)
La economía Popular y Solidaria, que comprende el movimiento generado alrededor de cooperativas, banca comunal y cajas de ahorro, representa el 14,2% del Producto Interno Bruto (PIB). El 80% de los créditos otorgados en el sector va a personas de entre 30 y 65 años.
Margarita Hernández, superintendente de Economía Popular y Solidaria, explicó que los beneficiarios del financiamiento cooperativo y comunal se encuentran en todos los estratos sociales, pero sobre todo en los de más bajos ingresos, y que encuentran en el emprendimiento y el autoempleo una forma de superarse.
El 24% de los créditos del sector va a ecuatorianos entre 50 y 65 años. “Este segmento es uno de los más vulnerables porque ya no puede encontrar ningún tipo de trabajo, y en más del 70% de los casos no tiene seguro, público o privado”, comentó Alberto Miranda, economista y experto en cooperativismo.
Asimismo, hasta el 40% del financiamiento beneficia a jóvenes entre 18 y 29 años, que son otro de los grupos más golpeados por el desempleo y la informalidad. Finalmente, entre el 25% y 31% de los préstamos beneficia a personas entre 30 y 38 años. Estas cifras se mantienen desde 2012.
“El usuario de cooperativas, banca comunal y cajas de ahorro, en el 76% de los casos, tiene como máximo hasta instrucción secundaria; y una edad promedio entre los 30 y 39 años”, puntualizó Hernández. El ingreso mensual de los usuarios es de 1.827 dólares para hombres y 1.693 para mujeres.
Evolución sostenida
14,2%
del PIB representa la economía popular y solidaria. Los activos en la Economía Popular y Solidaria han crecido 132% desde 2012, hasta llegar a los 14.000 millones. Actualmente, existen 3.333 puntos de atención, entre oficinas matrices y sucursales, en todo el país. De ese total, 1.099 está ubicadas en zonas donde el rango de pobreza supera el 50%; 674 puntos está en territorios donde la pobreza supera el 75%.
Otra característica del sector es que se coloca créditos más de lo que se captan depósitos. En otras palabras, por cada dólar captado, se entrega financiamiento por un dólar 68 centavos. (JS)