NELSON SÁNCHEZ VILLACÍS
Una vez que el nuevo gobierno precedido por el Presidente Lenin Moreno, comenzó su administración, se tuvo conciencia que habían cambiado algunas formas de comunicación y de comportamiento. En poco tiempo obtuvo buenas calificaciones su forma de actuar, es así que en sus primeros cien días gracias a sus actuaciones, su aceptación había subido de calificación incrementándose los porcentajes de su votación en las elecciones. Cuando llamó a consulta popular con los doce puntos a resolver por parte del conglomerado, su aceptación subió en algunos puntos adicionales.
Entre otras medidas resolvió poner en práctica los comités de gestión con las cámaras de producción. Una vez que entregaron sus ponencias, el Presidente informó sobre las medidas económicas que serían puestas en práctica para paliar la crisis económica que está presente desde antes de que se hiciera cargo el nuevo gobierno. Estas medidas no han sido del todo bien recibidas por los medios de producción por que indican que se quedaron cortas respecto al cuestionario que se hizo llegar al gobierno. Parece que no se puso en práctica estas recomendaciones tanto por que el gobierno tiene su propia lectura sobre la economía, que indica que será el Estado quien deba controlarla, como también que los funcionarios responsables, son casi los mismos que llevaron las tareas económicas en el gobierno anterior.
Adicional deben haber pensado que la mayoría de habitantes del país tienen poca preocupación sobre medidas económicas que se tomen o no, porque lo que les interesa, es que sus precarias necesidades estén medianamente cubiertas. Mientras aquellos que generan bienestar general a través del empleo y ayudan a que la población tenga ingresos, muestran su seria preocupación porque no se ha tomado en cuenta sus sugerencias. Según ciertos expertos en economía, las medidas adoptadas por el gobierno no solucionan ningún problema, se ofreció bajar los impuestos pero los aranceles de aduanas subirán más, la corrupción no ha sido resuelta más bien camina aun paso demasiado lento, no hay voluntad para rebajar el aparato gubernamental, se sigue en el endeudamiento agresivo. El final es incierto.