Impacto económico

La preocupación por la posible pandemia del coronavirus no solo se limita al aspecto de salud pública, sino que va más allá, es en realidad una afectación con un impacto económico importante, se estima de acuerdo con la consultora ‘Capital Económics’ que para el primer trimestre del año la pérdida ascienda a casi 280 mil millones de dólares considerando que el brote es precisamente en la actual fábrica del mundo y segunda economía del globo.

De hecho en las ciudades de mayor afectación muchas fábricas han cerrado sus puertas para evitar reuniones de gente que pueda propagar el virus, igualmente se ha frenado la producción de teléfonos móviles inteligentes considerando que China es el principal fabricante, según un artículo de la BBC, actualmente este país es el mayor proveedor de turistas del mundo y el dinero que gastan en sus viajes superan a los de cualquier otra nacionalidad ahí también existe un impacto global, de paso las compañías aéreas perderán aproximadamente 29 mil millones en este 2020 convirtiéndolo en un año muy difícil para la industria aeronáutica, las principales bolsas de valores acumulan algunas jornadas consecutivas a la baja y su incidencia afecta a las principales bolsas de nuestra región, pero hay un ingrediente adicional y es que en Latinoamérica el efecto se genera en la caída en los precios de las principales materias primas, en el caso del Ecuador la proforma presupuestaria para este año se estructuró a un precio de USD 51 dólares por barril de petróleo y con una producción de mínimo 528 mil barriles diarios, resulta que en febrero empezamos con un promedio de USD 60 dólares y esta semana ya se ubicó a menos de USD 50 dólares por barril con tendencia a seguir cayendo, en consecuencia la afectación económica para el Ecuador podría ser dramática incrementando el déficit fiscal para este año tomando en cuenta que no hemos topado subsidio alguno, estos temas nos dejan dos lecturas, por un lado la preocupación de que el país no está preparado para enfrentar esta crisis en cuanto a infraestructura y economía así como también nos demuestra la evidente dependencia mundial con el gigante asiático. Literal, si China estornuda, el planeta se resfría.