Calma y prudencia

Juan Sebastián Vargas

Mucha gente está entrando en pánico, en los últimos días los supermercados estuvieron abarrotados y lo único que ocasionan es precisamente la aglomeración que es lo que debemos evitar, los mensajes en redes sociales están llenos de especulación y lo único que causan es incertidumbre, no reenviemos toda la información que nos llega y que no tiene mayor sustento ya que eso también es ser irresponsable, si bien debemos estar alertas y tomar precauciones, considero que lo más importante es ser prudentes y actuar calmados siguiendo los protocolos que nos han informado los medios oficiales, las acciones emprendidas por el gobierno al evitar eventos públicos masivos y la suspensión de clases a mi parecer me parecen oportunas, esa estrategia se llama “distancia social”, tuve la oportunidad de revisar y entender las curvas de tendencia a lo largo de la historia cuando han existido epidemias y pandemias y en todos los ejemplos los países y ciudades que activaron los protocolos con anticipación son aquellas que lograron minimizar el impacto y en las que no lo hicieron a tiempo el impacto fue grave, esta estrategia de distanciamiento social no implica que se vaya a eliminar al virus, pero si frenar la velocidad de transmisión y según los entendidos eso se llama “aplastar la curva”, aquí es un tema de decisión y velocidad y tomando el ejemplo de lo que sucedió en Whuan, la letalidad se incrementa cuando colapsa el sistema sanitario y es precisamente esa línea en la mitad de la curva de tendencia que no queremos sobrepasar y acá viene otro tema importante, hay países con un sistema de salud más robusto en donde esa línea es mayor y otros países en vías de desarrollo en donde esa línea es mucho más baja y en consecuencia el colapso puede ser más rápido, de hecho esta enfermedad es menos mortal si en los casos graves los pacientes tienen acceso a cuidados especiales.

Actualmente hay países que ya están pasando esta curva como Corea del Sur, es por ello que la estrategia de distanciamiento social es muy efectiva para frenar la propagación. La suspensión de eventos masivos, aglomeración de gente, misas, partidos de fútbol o cualquier evento de gran magnitud es de gran importancia.