Preocupación en usuarios de educación especial

REALIDAD. Los menores tienen que acompañar a sus padres a las labores diarias.
REALIDAD. Los menores tienen que acompañar a sus padres a las labores diarias.

Padres de familia de escasos recursos aseguran no saber cómo contribuir al desarrollo de sus pequeños, piden ayuda.

Enfrentar la pandemia del coronavirus no es fácil para nadie, mucho menos para los padres de niños que tienen alguna discapacidad y que antes de la emergencia sanitaria trataban de asistir a centros especializados para que puedan aprender y ser atendidos.

Hoy las condiciones para ellos son doblemente críticas, así lo evidencia Carmen Guamán, madre de una niña con discapacidad psicosocial, quien explica que su hija tiene deficiencias permanentes y atípicas de la personalidad, de las emociones, dela conducta, del comportamiento, de la comunicación y más aún del aprendizaje, por lo que ella acudía a una escuela especial.

“Pero desde que inició la emergencia sanitaria la tenemos en casa, y aunque nuestro amor por ella es infinito no sabemos cómo tratarla y peor aún como enseñarle”, comentó.

A decir de la madre la pequeña en la escuela ya estaba aprendiendo a concentrarse y de a poco iba mejorando su comunicación y comportamiento, pero ya más de dos meses sin recibir clases simplemente “volvió a cero”.

Desesperación

Entre cultivos, juguetes desgastados y su inocencia, Alex, un niño de 7 años que tiene Síndrome de Down acompaña a sus padres al trabajo diario como agricultores.

Él es parte de la Escuela Especial Ambato, pero de igual forma sus padres poco o nada conocen de cómo deben ayudar al pequeño para su desarrollo.

“Sí le envían los deberes a mi hija mayor porque ella tiene celular y WhatsApp, pero ella vive lejos y viene de vez en cuando”, comentó su madre,al tiempo de asegurar que no cuentan con recursos como para quedarse en casa y menos acceder a la tecnología.

A decir de la madre desde que se dio el aislamiento no ha vuelto a saber de la escuela desu hijo, ni de las terapias ni de la enseñanza.

Ella no cuenta con recursos económicos, por lo que sale a diario a trabajar como jornalera y lleva a su hijo, además, comenta que a pesar de que el menor tiene esta discapacidad nunca a recibido ningún apoyo del Estado.

“No llega ni el bono normal, ni el de discapacidad de mi hijo y ahora tampoco el bono de emergencia”, comentó al tiempo de asegurar que debería existir algún proceso para que su hijo siga aprendiendo y continúe su desarrollo.

Autoridad

Desde el Ministerio de Educación se manifestó que se ha emitido el lineamiento para la comunidad educativa de Atención a Estudiantes con Necesidades Educativas Especiales Asociadas o no a la Discapacidad y en Situación de Vulnerabilidad, durante el período de Emergencia Sanitaria Covid-19, el cual está en vigencia.

Según estos lineamientos una de las responsabilidades de los docentes es garantizar que este proceso sea de la calidad, para lo cual los equipos distritales de Unidad Distrital de Apoyo a la Inclusión brindarán contención, atención y seguimiento a los estudiantes mediante llamadas telefónicas, correos, WhatsApp y han gestionado con tenencias políticas, COE, juntas parroquiales para enviar los planes educativos.

Además, se menciona que frente la emergencia sanitaria se necesita que se realicen con la guía y acompañamiento de su representante legal o una persona adulta que pueda orientar de manera armónica el proceso educativo. (FCT)