Falcon 9 surcará los cielos este sábado, rumbo a la Estación Espacial Internacional

(Foto: EFE)
(Foto: EFE)

Miami, (EFE).-

El tiempo no acompañó este miércoles a la misión Demo-2, que se propone llevar a dos astronautas a la Estación Espacial Internacional (EEI) desde suelo estadounidense por primera vez desde 2011. La misión debió ser aplazada hasta el próximo sábado en medio de una gran expectación y en presencia del presidente Donald Trump.

Quince minutos antes de la hora prevista para el despegue del cohete Falcon 9 de la compañía SpaceX desde el Centro Kennedy de Cabo Cañaveral (Florida), con la nave tripulada Dragon Crew en su punta, la NASA detuvo la cuenta atrás y anunció el aplazamiento debido a las condiciones climatológicas reinantes en la zona.
«Fue un gran día para SpaceX y la NASA, ambos equipos trabajaron a la perfección y tomaron las decisiones correctas. Simplemente había demasiada electricidad en el ambiente», dijo Jim Bridenstine, administrador de la agencia espacial estadounidense.»No había todavía una tormenta eléctrica pero existía la preocupación de que si continuábamos con el lanzamiento se produjera», agregó.
Esta misión significa un hito histórico, como la primera en llevar astronautas hasta la Estación Espacial Internacional desde una empresa privada.
La NASA y SpaceX volverán a intentarlo el sábado 30 de mayo a las 15.22 (19.22 GTM) y el presidente Trump se comprometió a estar presente de nuevo.
«Lo entendemos y apreciamos el trabajo de todos aunque estamos un poco alicaídos. Aun así, son cosas que pasan y volveremos a intentarlo el sábado», dijo el astronauta Bob Behnken, protagonista de la misión junto a su amigo y colega Doug Hurley.
Además del presidente, que estuvo acompañado de la primera dama, Melania Trump, se desplazó hasta Cabo Cañaveral el vicepresidente Mike Pence para poder ver el despegue en persona.
Musk aseguró «estar consiguiendo que uno de sus sueños se hiciera realidad» y dijo que en 2002, cuando fundó su compañía aeroespacial, «nunca imaginó que viviría un momento como este».
«Esto es la combinación de un gran trabajo para la NASA, todos sus socios y todas las personas que han trabajado duramente para que esto ocurra», aseveró Musk.
Los astronautas se mantendrán en aislamiento hasta el sábado aunque podrán disfrutar de tiempo con sus familias.
Este lanzamiento es la prueba final para que la empresa aeroespacial SpaceX, que participa en un programa de la NASA que comenzó en 2010 y está dotado de miles de millones de dólares, se encargue a partir de fines de este año del transporte de los astronautas de la NASA a la Estación Espacial Internacional.