Este 21 de septiembre se hará la convocatoria a concurso público para concesionar la Refinería de Esmeraldas

Las empresas internacionales interesadas tendrán 3 meses, hasta el 23 de diciembre 2020, para presentar sus ofertas técnicas y económicas.

Luego de más de dos años de anuncios, y dos meses después de la emisión del decreto ejecutivo 1094, donde se ordenaba la concesión de la Refinería de Esmeraldas a la iniciativa privada, el proceso realmente iniciará este 21 de septiembre 2020 mediante la convocatoria a concurso público.

A partir de esa fecha, las empresas internacionales interesadas tendrán alrededor de tres meses, es decir, hasta el 23 de diciembre 2020, para presentar sus ofertas técnicas y económicas.
René Ortiz, ministro de Energía y Recursos Naturales no Renovables, a través de una rueda de prensa virtual, explicó que se busca una inversión estimada de $2.400 millones para cumplir con varios temas:

1.- Reparación de instalaciones y componentes de la refinería

2.- Mejoramiento de la calidad de los combustibles

3.- Reducción de emisiones contaminantes

4.- Implantación del proceso de alta conversión de hidrocarburos.

5.- Refinación de crudo y producción de combustibles

Fernando Santos Alvite, asesor del ministerial, precisó que se hará una preselección de los oferentes bajo dos parámetros. Por un lado, se deberá acreditar experiencia en la construcción de, al menos, dos unidades de refinación en los últimos 20 años. Además, las empresas tendrán que acreditar, al menos, 10 años de experiencia y operación de infraestructuras similares a la Refinería de Esmeraldas.

Durante la calificación y hasta la publicación de la adjudicación, dos técnicos ecuatorianos manejarán y asesorarán todo el proceso. El primero es el ingeniero Alfredo Monje, quien participó en la construcción de la refinería en los años 70 y luego fue el primer superintendente y director. El segundo es el ingeniero Jorge Barros, el cual también fue superintendente y, en los últimos años, estuvo manejando refinerías en Rusia.

Evitar repetir errores del pasado

Ortiz recalcó que la repotenciación, hecha durante el Gobierno de Correa, “no sirvió para nada”, y que la calidad de los combustibles que se procesa actualmente está muy lejos de los mínimos estándares internacionales.

En este sentido, reconoció que son justas las quejas y angustias expresadas por la comunidad aledaña a la infraestructura porque ha tenido que soportar una “alta contaminación y fuertes olores”.

Por eso, la delegación a manos privadas tiene como principal objetivo recuperar el principal activo industrial petrolero del Ecuador, y, a la par de reducir el impacto ambiental, solucionar dos grandes problemas.

En primer lugar, que no existe la suficiente producción, por lo que cada año se debe importar 60% del consumo nacional de combustibles. En segundo lugar, la refinería produce alrededor de 45.000 barriles diarios de residuos, que no se puede aprovechar y se convierten en desperdicio.

Así, el modelo de delegación será por 25 años; y la empresa concesionaria deberá recuperar su inversión a través del cobro al Estado de una tarifa por cada barril refinado de combustible. Esa tarifa no podrá ser mayor al actual costo de operación que tiene Petroecuador.

El dato.- La demanda interna de combustibles crece 4% al año. Si no se aumenta la producción, el déficit para cubrir el consuno de combustibles llegará a los 295.000 barriles diario en 2030.

El dato.- Las autoridades buscan que la calidad de los combustibles cumpla con el estándar Euro 5