La travesía de las pacientes con cáncer de mama

Iniciativa. A través del proyecto ‘Cicatrices de Honor’, 10 mujeres de diversas provincias contaron sus experiencias con el cáncer
de mama.
Iniciativa. A través del proyecto ‘Cicatrices de Honor’, 10 mujeres de diversas provincias contaron sus experiencias con el cáncer
de mama.

Solo cuatro ciudades realizan el tratamiento, lo que representa tiempo y dinero para quienes padecen esta enfermedad catastrófica.

Nueve meses tardó Jane Andrade en ser diagnosticada con cáncer de mama. La mujer de 39 años, oriunda de Esmeraldas, cuenta que cuando acudió al hospital público de su provincia, la ginecóloga no contaba con equipos para hacerle una punción lumbar.

“Pasé mucho tiempo esperando a que me deriven a un centro de salud en Quito”, cuenta Andrade, quien tuvo que acudir a un centro privado donde finalmente le dieron el diagnóstico. Su historia inició en 2017; han pasado tres años y lamenta que el acceso al tratamiento y las medicinas sigua siendo limitado.

Ese testimonio lo comparte su coterránea Daysi Castillo, quien fue diagnosticada hace dos años. Dice que es complicado trasladarse de un lugar a otro para ser atendida.

“Me tocó recibir quimioterapia en otra ciudad. Después de la fatiga que eso representa, viajar ocho horas es difícil”, cuenta la mujer de 34 años, quien es tratada en Portoviejo, una de las cuatro ciudades donde la Red de Salud Pública da tratamiento oncológico, junto a Quito, Guayaquil y Cuenca.

Cifras mundiales y en el país

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el cáncer de mama es el más frecuente en mujeres. Se estima que, a nivel mundial, una de cada ocho es diagnosticada.

En Ecuador, anualmente se presentan 20.000 nuevos casos. Inclusive, el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC), lo sitúa entre las primeras causas de muerte más comunes de las mujeres en el país.

Pese a la dimensión de esta enfermedad catastrófica, Gustavo Dávila, director de la Fundación Jóvenes Contra el Cáncer, indica que no existe una actualización real de las cifras, precisamente porque los diagnósticos y los tratamientos se hacen únicamente en cuatro ciudades del país.

Gastos extras

La falta de centros especializados en todas las provincias representa gastos extras para las pacientes, así lo confirma Silvia Carrillo, de Imbabura. “Nos toca madrugar dos, tres de la mañana para llegar a nuestras citas. Si nos atrasamos nos dan turno para otro día y no podemos esperar”, cuenta Carrillo.

En su provincia, el único centro especializado es Solca: “pero usted sabe que los costos son bastantes caros. Mi atención es en el hospital Eugenio Espejo (en Quito)”.

Antes de la pandemia generada por el Covid-19, Carrillo gastaba $20 en transporte hasta la capital; pero, con las restricciones de movilidad tuvo que buscar otro medio, por el que tenía que pagar hasta $50, por el viaje de ida y vuelta.

Para Evelyn Regalado, de 28 años, el costo no ha sido solo económico. Ella tuvo que mudarse desde Carchi hasta Pichincha, luego de ser diagnosticada.

“Tuve que dejar a mi familia y enfrentar así el cáncer”, dice Regalado, quien en varias ocasiones ha debido costear los medicamentos e incluso realizarse quimioterapias en centros privados. A esto hay que sumarle el arriendo. (AVV)

Sin carnet de discapacidad

Con indignación, Gustavo Dávila, director de la Fundación Jóvenes Contra el Cáncer, recuerda la dificultad que tienen los pacientes con enfermedades catastróficas o raras para acceder a un carnet de discapacidad.

Ana Cobo tiene cáncer de mama desde 2014. Luego de que le amputaran el seno izquierdo tuvo dificultades para utilizar su brazo. Ella realizó el trámite para obtener el carnet de discapacidad, en 2016. Sin embargo, luego de meses de pasar por distintas consultas en centros del Ministerio de Salud, el médico le negó el pedido. “Me dijo que no me puede dar el carnet porque tengo mis extremidades y tengo mis ojos”, dice Cobo, quien además tiene osteopenia y problemas de la visión, por la quimioterapia.

“Estas mujeres no quieren el carnet para comprarse autos de lujo, sino para pagar medio pasaje en el bus”, añade Dávila; en referencia a lo sucedido con varios funcionarios públicos investigados por tener este tipo de certificado, con el presunto fin de exonerarse de impuestos, al momento de importar bienes, como vehículos de alta gama.

Estudio y atención de pacientes

  • Según un estudio realizado por Jóvenes Contra el Cáncer, de 140 mujeres con cáncer de mama, el 81% no tiene carnet de discapacidad.
  • Además, el 45% de ellas recibe atención en Solca, el 29% en el Hospital Eugenio Espejo, el 14% en el IESS y el 12% en otros hospitales.
  • Mientras que 6 de cada 10 son madres solteras y jefas de hogar.

“(Realizar tratamientos contra el cáncer en cuatro ciudades) es una debilidad del sistema de salud. Al no haber cifras difícilmente se puede trabajar en prevención”. Gustavo Dávila, director de la Fundación Jóvenes Contra el Cáncer.

El 19 de octubre es el Día Mundial Contra el Cáncer de Mama.

670 defunciones se registraron en 2017 por cáncer de seno, de esas, tres fueron de hombres.