Mujeres siguen relegadas a papeles secundarios en la política ecuatoriana

Ximena Peña, de Alianza País, es la única mujer que competirá por la presidencia en las elecciones del siete de febrero de 2021.
Ximena Peña, de Alianza País, es la única mujer que competirá por la presidencia en las elecciones del siete de febrero de 2021.

La realidad es innegable. Las mujeres siguen relegadas a papeles secundarios en la política ecuatoriana, esto se puede evidenciar en los binomios presidenciables que están a punto de competir para llegar a Carondelet el 2021.

Luego de terminar el plazo para que las organizaciones políticas inscriban sus candidaturas ante el Consejo Nacional Electoral (CNE), entre los más de diez candidatos a la Presidencia de la República solo hay una mujer, Ximena Peña de Alianza País.

Sin embargo, esto no sucede en las candidaturas a la vicepresidencia, donde existen varias mujeres que acompañan a los presidenciables, relegándolas a un papel secundario.

Así lo reconoce Cristina Burgos, Directora de Women for Women Ecuador, una organización dedicada al desarrollo y liderazgo de la mujer, quien manifiesta que este fenómeno parte de una concepción cultural y sesgos inconscientes.

“Al concebir tradicionalmente el ámbito político como un espacio masculino, las mujeres no se involucran, ni tampoco los hombres las involucran, es un efecto de doble vía”, dijo Burgos.

Añadió que esto no solo sucede en la política, sino también, en el ámbito de la tecnología, ciencias e ingenierías, pese a los avances constitucionales que establecen una sociedad igualitaria.

“En las últimas elecciones seccionales, en 2019, las mujeres lograron representación en cuatro prefecturas y 18 alcaldías, lo que apenas es el 8% de los gobiernos locales en el país, demostrando así que aún queda mucho por hacer”, mencionó Cristina Burgos.

Así mismo, Judith Flores, experta en Sociología y Ciencias Políticas, comentó que las mujeres siempre han estado relegadas en el ámbito político y cuando ocupan cargos importantes “tienen que responder a agendas que no necesariamente son propias”.

Reforma con fines de participación igualitaria

El Consejo Nacional Electoral (CNE), realizó una reforma al Código de la Democracia, en febrero de este año, donde establece como objetivo llegar al 50% de participación de mujeres, progresivamente, en las dos siguientes elecciones.

Para ello el principal organismo electoral estableció que los partidos y movimientos políticos cumplan, como mínimo, con el 15% de mujeres en las listas de candidatos pluripersonales y el 30% en elecciones seccionales.

Rosalía Arteaga es la única mujer que llegó a la Presidencia de Ecuador en 1997. Recibió muy poco apoyo de los partidos lo que ocasionó que la relegaran de su cargo. Para las próximas elecciones de 2024, el Código de la Democracia obligará la paridad en los binomios presidenciables, es decir, habrá un hombre y una mujer en la papeleta para presidente y vicepresidente. También, sanciona la violencia política de género con multas.

“En esa época hubo machismo real, era muy difícil pensar que una mujer gobierne un país, a pesar de que yo tenía la ley de mi parte”, Rosalía Arteaga, expresidenta de Ecuador.

“Todavía vivimos en una sociedad patriarcal”

Wilma Andrade, asambleísta y presidenta del partido Izquierda Democrática, coincidió en que vivimos en una “sociedad patriarcal que repite patrones en el ámbito electoral”, por ello, cree necesario incentivar normas o estatutos para que los partidos políticos impulsen la participación femenina en la toma de decisiones.

Desde cambios simples como “que los horarios de las reuniones no sean en la noche o espacios lúdicos para que las mujeres puedan llevar a sus hijos”.

Además, destacó que en Izquierda Democrática realizan proyectos de formación política para mujeres e incluso ella fue postulada como posible candidata presidencial dentro del partido pero decidió no hacerlo.