Los verdaderos líderes políticos

Álvaro Peña Flores

El mundo ha estado en constante cambio, pero la pandemia le ha dado un giro completo que cambió nuestras perspectivas, la diferencia radica ahora en el ritmo y la velocidad, este cambio ha generado disrupciones que los verdaderos líderes preparados y comprometidos con su entorno pueden disminuir el impacto que generará.

En este ciclo de aportes del análisis de la corrupción en el país, es importante hacer hincapié en la identificación de los líderes políticos que nos han gobernado de forma directa o indirecta a lo largo de los últimos 25 años. Son conocidos los rostros que, siendo ministros, asesores o personas poderosas influyentes ahora continúen con la misma intención de seguir involucrados en la política ecuatoriana.

Con recta intención o no de aquellos, lo que necesitamos es líderes con propósito de un cambio radical en las políticas gubernamentales. Sus planes de gobierno deben estar enfocados claramente a asuntos relacionados con la deuda externa e interna, la corrupción, el sistema financiero, las fuentes de empleo, el sistema educativo universitario, el sistema de salud, por nombrar algunos; y lo que todos anhelamos ver, los poderes del estado haciendo lo que les corresponde de forma autónoma, transparente, imparcial y profesional.

El peso y la fuerza de sus ideas se deben ver reflejados en la coherencia que tengan entre su vida personal y su vida pública, que garantice la ética, la moral y la decencia. No podemos caer tan bajo eligiendo discapacitados, ladrones, violadores o asesinos; su reputación es la carta de presentación que incide en nuestras emociones e intelectualidad para asignarle el voto de confianza. Creo que, sin eso no deberíamos ni siquiera molestarnos en votar, la idea es ser agentes de cambio.

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