Irresponsabilidad ciudadana

El último fin de semana pasé por el centro de la ciudad y en varios sectores habían fiestas, con personas libando tomándose fotos, abrazadas muy alegres desbordantes de alegría, de seguro compartían “momentos de diversión”, pero claro, sin distanciamiento social, el lavado de manos efímero y lo más triste y a su vez decepcionante es que nadie utilizaba una mascarilla de protección. Consideremos que fueron varias reuniones de no menos de 20 personas. Las consecuencias del feriado del nueve de octubre se están viendo ya, mayor afluencia de personas sintomáticas a los hospitales y un aumento de la necesidad de camas en las unidades de cuidados intensivos. La irracionalidad de los irresponsables decanta en el riesgo de diseminar la enfermedad en sus casas siendo aquellos más vulnerables quienes padecerán las consecuencias. Si no hay el correcto cumplimiento a las medidas de bioseguridad para poder reducir la chance de contagios, las posibilidades de enfermarse son altas y los más vulnerables o con factores de riesgo serán los más complicados y con severos cuadros clínicos de COVID-19 con riesgo de morir. Muchos de los que disfrutan de estas fiestas están condenando a muerte a sus seres queridos y se están condenando ellos también. La inconsecuencia ciudadana ha hecho que los casos de esta enfermedad provocada por el coronavirus aumenten. Los feriados descontrolaron el raciocinio y permiten ver la real naturaleza del ser humano, que desafiamos y no me da eso.

La dotación de medicamentos sedantes para dormir a pacientes graves y colocarles un tubo por la boca a la tráquea para que una maquina respire por ellos, están escaseando. Sin esos medicamentos es imposible intubar y conectar a alguien al ventilador mecánico. Nota: el candidato presidencial Andrés Arauz dijo en un comunicado escueto lo siguiente: “haré el pedido para que hermanos cubanos puedan volver al Ecuador a apoyarnos en salvar vidas, a prevenir los contagios, a apoyarnos en toda la política de salud… (Sic)”. Señor Arauz, creo que su postura es incorrecta. Lo he dicho antes y me ratifico, a los médicos residentes que están tratando y vigilando 24 horas a personas graves y aquellos médicos que valoran personas con síntomas de sospecha de COVID-19, deben ser reconocidos con la apertura de posgrados con la remuneración adecuada, para luego servir en diferentes unidades médicas el país. Invierta en lo nuestro.

Luis Coello

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