Nueva cuarentena

En un día, los contagiados subieron a casi mil y se produjeron numerosas muertes por esta causa.

Ante la situación que amenaza la tercera oleada de virus, el primer ministro italiano anunció un decreto con instrucciones para que en el presente mes, especialmente en los festejos de Navidad y Año Nuevo, no se propicie escenarios para la expansión del mal que tiene sumido al planeta en letalidad y otros daños inmensos.

Los datos son alarmantes: entre febrero y octubre del año en curso, se contagiaron 325 mil personas y, desde este último mes hasta fines de noviembre, se ha quintuplicado la cifra hasta llegar al millón 700 mil casos positivos.

Se ha informado, con titulares de prensa inusuales, que todavía sigue muriendo bastante gente en Italia: recientemente, en 24 horas, perecieron 993 seres humanos, afectados por el Covid-19.

Al publicarse el mencionado decreto, entró en vigencia la cuarentena obligatoria, para nacionales y turistas, de aplicación entre el 21 de diciembre y el Día de Reyes, además de prohibiciones para desplazamientos entre regiones, implantación de toque de queda de nueve de la noche a cinco de la mañana, restricciones en hoteles y restaurantes.

El 80% de los encuestados se ha manifestado a favor de esas medidas que se vuelven indispensables y pide, inclusive, que éstas sean más estrictas, en vista de la gravedad de las circunstancias.

En nuestro país, donde las autoridades han desbaratado fiestas clandestinas, con cientos de asistentes y se ha visto muchedumbres en determinados sitios de varias ciudades, debe haber mayores campañas de concienciación y vigilancia, para no volver a otra cuarentena que sería devastadora, singularmente para la maltrecha economía.