Solo un consorcio está interesado y presentará su oferta hasta el 19 de febrero de 2021. El contrato se firmaría un mes antes de la llegada del nuevo Gobierno.
El Ministerio de Energía y Recursos Naturales No Renovables ha establecido que, hasta el 23 de abril, es decir, un mes antes de la posesión del nuevo Gobierno, se debe firmar el contrato de concesión, a 25 años, de la Refinería de Esmeraldas.
Fernando Reyes, vicepresidente del Colegio de Ingenieros Petroleros, explicó que se debería esperar seis meses para que el residente electo y su equipo de trabajo finalicen la negociación y cierren el compromiso.
“Con eso, se minimiza el riesgo de demandas internacionales en caso de que las nuevas autoridades no estén de acuerdo”, dijo.
Un solo interesado
Luego de más de tres meses, desde que el 21 de septiembre se lanzaron las bases del concurso, solo un consorcio está interesado en la iniciativa.
Fernando Santos Alvite, asesor del Ministerio, aseguró que el proceso puede continuar con un solo participante, siempre y cuando la oferta técnica y económica sea “beneficiosa para el país”.
Sin embargo, no hay certezas sobre las condiciones económicas y el modelo de negocio que asumiría el consorcio formado, entre otros, por Hyundai Engineering, el contratista norteamericano Kellog Brown & Root (KBR), Energlobal Investment Group, y Morgan Stanley como asesor para la estructuración financiera.
Sin transparencia
Guillermo Lagos, representante de Energlobal Investment Group, aseguró que todos los problemas que tienen que solucionar en la Refinería de Esmeraldas aún están por definirse y que la inversión aproximada llegaría hasta los $3.000 millones.
Desde el Colegio de Ingenieros Petroleros, se comentó que el modelo de negocios con los valores de cuánto costaría cada galón de derivados tampoco está claro, pues el que sirvió para las bases del concurso, establecía un costo de entre $3 a $4 por galón, a pesar de que internacionalmente los niveles están entre $2,25 y $2,5.
“Podríamos terminar con combustibles más caros, que serán pagados por los consumidores y afectarían a sectores como el transporte”, acotó Fernando Reyes.
Otro aspecto poco claro es que, según los representantes del consorcio, el Biess y otras entidades de la seguridad social estarían interesadas en invertir en la concesión, pero no se explican montos o condiciones. (JS)
Dudas sobre la concesión de la Refinería
- La Refinería no funciona bien y contamina, por lo que son necesarias reparaciones y una unidad de alta conversión.
- El futuro contratista debe transparentar cómo se tratarán los residuos, que representan el 35% del crudo diario procesado.
- No está claro cómo se cumplirán estándares de calidad Euro 5 y 6 y cuánto aumentará la capacidad de producción para que haya un ahorro en las importaciones.
- Tampoco se aclara cuánto costaría cada galón de derivados.
En 2016 se gastó más de $2.200 millones en la repotenciación de la Refinería de Esmeraldas, pero produce menos del 90% de su capacidad.