Cuatro pilares para un Banco Central independiente y técnico

REALIDAD. Una de las claves será la independencia del Ejecutivo de turno.
REALIDAD. Una de las claves será la independencia del Ejecutivo de turno.

El sábado se enviará Proyecto de Ley de reformas al Código Monetario y Financiero, para buscar la autonomía y fortalecer a la institución. Como consecuencia de los manejos políticos de la década correísta, hay una brecha de más de $6.000 millones entre reservas y depósitos, debido a que mucho dinero se desvió para gasto público.

Mauricio Pozo, ministro de Economía, explicó que el hecho de que el país esté dolarizado y no emita su propia moneda no quiere decir que no se justifique la presencia de un Banco Central técnico e independiente.

“El Banco Central independiente no es un experimento; existe en la mayoría de los países. Ecuador es más bien la excepción. Su importancia radica en impedir el uso inadecuado de los fondos como ocurrió en la década anterior, donde se tomaron $8.000 millones de las Reservas Internacionales para prestarle $6.000 millones al Gobierno y $2.000 millones a los bancos públicos”, dijo

Según el Ministro, para evitar que eso se repita, el 30 de enero de 2021 se enviará a la Asamblea un proyecto de Ley de reformas al Código Monetario y Financiero, con el fin de fortalecer las funciones de la institución como administradora y garante de la liquidez.

“La dolarización se mantiene porque hay dólares. Esos dólares vienen al Ecuador por exportaciones, remesas, Inversión Extranjera Directa, endeudamiento; y salen por importaciones y pagos de capital. El Banco Central debe tener todas las herramientas para dar seguimiento adecuado a esa liquidez”, acotó.

1. Estructura autónoma

Uno de los pilares de las reformas es que las decisiones se tomen a través de una instancia independiente del Ejecutivo de turno. Así, se propone restituir la figura del directorio con cinco miembros (tres tiempo completo y dos parcial). El mecanismo de designación es que el presidente de la República envía ternas; pero es la Asamblea la que decide la designación. Además, de acuerdo con Pozo, un aspecto importante es que el tiempo en funciones es de seis años, es decir, excede la permanencia del gobierno de turno.

En el proyecto de ley se establecen requisitos estrictos en materia de experiencia profesional, no afiliación a partidos y movimientos políticos, y no vinculación, durante al menos los 12 meses previos, como accionista, funcionario o representante legal de instituciones financieras o que puedan crear conflicto de intereses, entre otros.

2. Reservas

El segundo pilar es la restitución del sistema de cuatro balances, cuyo objetivo final es que cada dólar depositado en el Banco Central tenga respaldo en reservas. Es decir, si se quiere acuñar $0,5, se necesita ese mismo valor de respaldo; si la banca deposita $1.000 por encaje, tiene que haber $1.000 en las reservas de la institución.

Actualmente, como consecuencia de los manejos políticos de la década correísta, hay una brecha de más de $6.000 millones entre reservas y depósitos, debido a que mucho dinero se desvió para gasto público.

3. Prohibición de financiación monetaria

Otro aspecto importante es la prohibición expresa de que el Banco Central no pueda proporcionar financiamiento directo ni indirecto para el gobierno central, Ministerio de Economía, gobierno locales u otras instituciones públicas.

Esto desbarata completamente las intenciones de cubrir, con fondos del Banco Central, ofertas populistas como la transferencia de $1.000 a un millón de familias, o simplemente utilizar a la institución como una especie de caja chica del Presupuesto General del Estado (PGE)

“No es plata de libre disponibilidad del Gobierno de turno. Lo quiere hacer es tomar recursos de los bancos, que son plata de la gente. Si no hay respaldo no se puede hacer”, aseveró Pozo.

4. Tercero confiable

Un cuarto pilar tiene que ver con fortalecer al Banco Central como ente técnico y externo que presente opiniones independientes sobre temas importantes como la elaboración del presupuesto, endeudamiento público y crecimiento económico.

“Que no sea el Gobierno el que genere la información para la toma de decisiones. Se necesita un tercero confiable que genere cifras y permita llegar a decisiones más acertadas y ajustadas a la realidad, y no a las conveniencias de las autoridades de turno”, recalcó Pozo. (JS)

El proyecto de reformas para fortalecer el Banco Central es la última ley que presentará el actual Gobierno dentro del acuerdo con el FMI.

El Banco Central independiente no es un experimento; existe en la mayoría de los países. Ecuador es más bien la excepción”. Mauricio Pozo, ministro de Economía.